Pues yo diría que estás condenada a entenderte extrajudicialmente con tus hermanas. Si ellas no quieren dividir la cosa común, tú puedes forzar una partición judicial, con lo cual la casa sale a subasta, con lo cual nadie saca un duro, con lo cual todos jodidos y encabronados con la familia de por vida. Otra cosa es que tú, como dueña de una parte de la vivienda, tengas derecho a una parte de esos frutos que se están percibiendo (alquiler del garaje) y también derecho a cobrarle algo a tus hermanas por vivir en la casa.
Independientemente de todo eso, si no se ha modificado la titularidad en el registro de la propiedad, yo lo haría. No vaya a haber sorpresas futuras.