Yo también pienso que el notario y el registrador son figuras insustituibles. Mucho menos por aplicaciones informáticas que no saben manejar la mayoría de la población.
El fedetario público realiza muchísimas funciones, como mucho se le podría descargar de alguna a lo sumo.
Las personas seguimos siendo imprescindibles, por mucha tecnología que vaya surgiendo!