Buenas noches, compañeros. No soy de participar mucho en el foro, pero las historias humanas que hay detrás de vuestros motivos para estudiar Derecho son impresionantes y nos dan a todos una gran lección de humildad. Sinceramente espero que de entre nosotros salga una promoción de abogados que humanize la justicia y de verdad crea en ella, pues pienso que el Derecho no es mas que el camino hacia la verdadera justicia. No puede ser otro.
Yo no creo que tenga ninguna historia comparable con la vuestra. Simplemente abandoné los estudios de bachillerato y una vez cumplidos los 25 años realicé el curso de acceso de la UNED. Pero eso fue en 1993. Me llegué a matricular en primero de la licenciatura, pero cuando ví los libros, que eran solo cuatro: Derecho Político (los Cosntitucionales de hoy en día), Derecho natural (Teoría del Derecho de ahora), Derecho Romano e Historia del Derecho, no comprendía nada. De verdad, todo me sonaba a chino. Así que ahí se quedó la cosa. Y no lo he retomado hasta bien entrados los cuarenta. Mi meta es acabar el año que viene con algunas asignaturas sueltas que he ido dejando, y acabaré con... 54 años. Mirando hacia atrás me parece increible doblemente. Por una parte porque ahora ya si entiendo aquél dialécto del chino de hace casi treinta años, y porque, ironias del destino, una de las desmotivaciones en 1993 era que la licenciatura la acabaría con 30 y ya era demasiado viejo para empezar. Viejo con 30 años.... quien los volviera a tener.
Pero nada de lo dicho explica mi motivación. Y es que desde joven he tenido afición a hacer de "abogado" como hobby. He discutido con todo tipo de empresa, he buscado la ley, he buscado jurisprudencia, he ganado contra telefónicas, eléctricas y cualquier gigante que se me haya puesto enmedio, así que aquí estoy. Decidí "oficializarlo" y, bueno, con suerte a los 56 de abogado. Vaya tela. Lo que ya no sé es se lo usaré profesionalmente, tengo que explorar las oportunidades, pero me gustaría.
Pero sobre todo me gustaría que "los nuevos", con nuestros ideales y sueños, pongamos nuestro granito de arena para cambiar la justicia, porque a veces a uno se le caen los palos del sombrajo al leer los medios. No puede ser que la justicia solo exista para los poderosos. En el ámbito penal no puede ser que el poderoso y adinerado juegue con el sistema y obtenga trato privilegiado tanto en la vida en prisión como a la hora de obtener beneficios penitenciarios que a la inmensa mayoría de los internos se les conceden solo tras solicitarlos durante mucho tiempo. Desgraciadamente he visto con mis propios ojos como a una persona cercana le ha caido todo el peso de la justicia, por que se ha equivocado y evidentemente ha cometido un delito, sí, pero no ha tenido un juicio justo. Y no lo ha tenido porque simplemente no se ha podido permitir pargar a un abogado que pusiera interés en defenderlo. Sin embargo, una persona mediática que compartía celda con él, y con un delito de igual o mayor gravedad, salió libre unos días antes porque se pudo permitir un buen abogado y porque se pudo permitir repartir una buena "indenización" a las víctimas.
Pero no toda la injusticia, a mi humilde juicio, queda en ese ámbito penal, tambien la hay en el civil. También he conocido casos en primera persona donde un buen abogado de pago se come a quien lleva razón pero solo se puede permitir un abogado de oficio. Y soy consciente de que esto puede crear polémica, pero en los casos que he visto abogados de oficio, !qué falta de interés he observado!
Y estas cosas mas de una vez me ha hecho estar a punto de tirar la toalla, pero por otra parte, después del desaliento, la tristeza y la impotencia, llega la luz, es luz que dice que para luchar contra la injusticia hay que hacerlo desde dentro. A buenas hora mangas verdes. Pero en eso estoy.
Y acabo diciendo que me ha tocado especialmente lo de la madre orgullosa. Mas que nada porque en mi caso sería así, especialmente mi padre, que en su momento me quiso ver vestido de toga, y pasó el mal rato de ver como lo abandonaba. Ni mi padre ni mi madre están ya aquí para verlo cuando llegue el momento... aunque a este pasa vamos a ver si estoy yo... Pero bueno, tengo la confianza de que donde estén, de algo se enterarán y también se sentirán orgullosos.
En fin, un fuerte abrazo a todos, mucha suerte en los exámenes y, claro que sí, adelante, que hay que sacar esta carrera. Y felicidades a los que ya la han sacado.