La verdad es que son unos chapuzas: a quién se le diga que hay que entrar en la convocatoria de febrero para ver los exámenes de la de junio... Es increíble que se haga lo costoso -escanear los exámenes de cada asignatura y alumno- y se falle tan estrepitosamente en lo fácil -ubicar el examen en su correspondiente lugar-, ergo: pido que aparezca el nombre del responsable y el sueldo anual que se embolsa para mofa y escarnio de todos, ya que parte de ese salario sale de nuestros riñones por doble vía en la mayoría de los casos: matrícula e impuestos.
Exijo una explicación del lumbreras de turno, porque, al menos, ha habido un fin de semana para rectificar. Y si se mete la pata tan escandalosamente, se compensa currando sábado y domingo, que se van a ir de unas largas, muy largas, muy larguísimas vacaciones -ya las quisiéramos la mayoría de los alumnos- ya mismo.