Buenos días,
llámenme inocente pero yo no veo el aura diabólica que comentan ustedes. La división de asignaturas es algo que, como ya han apuntado ustedes, se lleva solicitando por los alumnos desde hace años; hay un trabajo titánico detrás de esto, mucho esfuerzo de muchos delegados, muchas conversaciones intentando ganar partidarios entre los profesores y equipos docentes. Con el paso del tiempo se han ido ganando estas batallas que juntas han conformado la guerra, si me permiten la metáfora bélica. Además no olviden que estos cambios no han sido impuestos a los departamentos sino que los que han querido han aceptado y los que no, pues no.
En cuando a la dificultad de los exámenes les recuerdo que las asignaturas que más fama tienen de ser huesos son precisamente anuales así que ese argumento de "no podían ser muy cabrones" desde mi punto de vista no se sostiene demasiado. Los ED, además, pueden hacer los exámenes de la dificultad que quieran, como se ha demostrado a lo largo de los años en cualquier asignatura: piensen en Procesal y Penal(anual) o en Historia del Derecho y Administrativo I (semestral) si ir más lejos, que según el año ponen un examen más o menos complejo. Ahora que se han dividido no se si modificarán la dificultad de esos exámenes pero no le veo el sentido más allá de lo que hacen habitualmente con independencia de su anualidad o semestralidad.
Por otro lado no se han modificado el número de créditos correspondientes a las asignaturas divididas por lo que, por ejemplo Financiero y Tributario II, sigue teniendo 9 créditos. Al departamento, a nivel administrativo, le da igual que sean 4,5 + 4,5 que 9, hecho que se desprende de las alegaciones que han aportado los que se han negado a hacer la partición de asignaturas: de haber sido un problema administrativo lo habrían esgrimido como excusa y no ha sido así. El por qué estos departamentos no han accedido finalmente a su partición es un misterio sin resolver que nos planteamos los que no estamos de acuerdo con los motivos que han dado (¿unos sí pueden y otros no? Si esos mismos argumentos deberían valer para todos...); especialmente cuando es algo que debe aprobar, y de hecho ha aprobado, la ANECA.
En fin, siendo prudente no descarto un cambio de política departamental ya que todo es posible pero no le veo el sentido o la motivación kafkiana con intención de ametrallar a los alumnos a suspensos o exámenes dificultosos como venganza a que su asignatura ya no sea de 9 créditos anuales sino de 4,5 créditos semestrales siendo además una decisión que han adoptado ellos sin obligación alguna.
Un saludo a todos