Apreciado Rubenl, la frase pronunciada por uno de los mejores políticos del XX no es que no diga nada, al contrario, dice mucho, muchísimo. Reléela con un poco de detenimiento y te darás cuenta de que nada meciona sobre la inexistencia de impuestos, -cosa que sería absurda de todo punto evidentemente-, sino que explicita que la prosperidad de una nación no puede basarse en ellos.
Todo sistema impositivo debe detraer de la sociedad el quantum mínimo para realizar las funciones que son competencia del estado. El premisa básica que para detraer la cantidad X, previamente debe de haberse generado la cantidad de riqueza X*Y. Por ello la frase mencionada pone de relieve que el estado no puede (no debe) basar su prosperidad en la presión fiscal, sino en alentar la creación de riqueza por parte de los sujetos y después realizar la detracción pertienente.
Seguro que lo sabes sobradamente, pero pondré un ejemplo simple para que resulte patente: Si el sujeto H crea una riqueza de 100 y la detracción es del 70% al sujeto H le quedan 30 para reinvertir y consumir, por tanto quedan 30 para volver a generar riqueza, mientras que el estado ha obtenido 70. Si al mismo sujeto se le aplica un % menor -supongamos 40%-, al Sujeto H le quedarían 60 para volver a generar riqueza -el doble-. Esto nos daría un resultado de doble generación de riqueza y en el siguiente periodo de exacción impositiva la base serían 200 y no 100, por lo que el estado habría obtenido 80 -diez puntos más que con la presión fiscal anterior-, y al sujeto H le quedarían 120 en lugar de los 30 para consumo y reinversión.
El ejemplo es sencillo y existen muchísimas más variables, pero tomándolo como base podemos deducir que una nación necesita que los agentes productores generen riqueza para prosperar, y que, no son los impuestos la via para esa prosperidad, estos son solo una herramienta más, pero núnca la base del desarrollo.
Esta premisa no sería de aplicación en un estado autárquico evidentemente, pero como resulta patente, los flujos internacionales de capital y medios productivos son cada dia mayores, y si nos centramos en nuestro entorno, la propia legislación de la UE rechaza que un estado sea agente productor, al ser conscientes de que esa no es su función.
Resumiendo, el impuesto es -debe ser- un corrector de desvíos (creación de una carretera, ayuda a un minusválido...etc), pero núnca un agente económico que sea tomado como base y punto de partida para hacer prosperar una nación.
Lo de la usura no acabo de encajarlo en el tema que estamos hablando (presión fiscal-productividad-progreso) y quizá sea objeto de una línea conversacional independiente que con muchísimo gusto tendría contigo.
Un saludo