Estoy de acuerdo de que en este turbio asunto sólo vemos la punta del Iceberg, pero algo está claro: hay un móvil evidente para acusar al Kremlin, puesto que este señor era molesto, como otros que ya fueron liquidados antes. Lo que no sabemos es lo que sabía y a quién podía hacer daño. El Kremlin, no es sólo el Kremlin. Existen muchos peces gordos en Rusia bien acomodados en sus mafias, que ven como peligroso que un tipo investigue estas cosas. A Putin le molestaba Litvinenko, pero es muy posible que haya utilizado a otros enemigos del agente ruso para liquidarlo. Eso abre muchos matices, por que a los intereses del Kremlin se suman otros. Utilizar una fuente radioactiva para matar contiene un mensaje ,no del todo claro, en el que se puede interpretar que matar a Litvinenko no era el único propósito.