El vago, holgazán, perezoso o simplemente flojo que decimos por aquí no es precisamente el modelo a seguir por los menores.
A mí me da igual lo que cada cual tenga por conveniente hacer con su vida, pero desde luego no con mis impuestos. Si una o uno no quiere darle un palo al agua, perfecto, pero con su dinero. Si pretende hacerlo con lo mío, lógicamente le llamaré flojo hijo de la g.p. y me cagaré en sus p.m.
En cuanto a la adicción al sexo, yo estoy muy de acuerdo con uno que dijo que el sexo es algo natural. En tanto que natural, no me casa demasiado con la adicción, más cercana a los conceptos de “sometimiento”, “enfermedad psíquica”... No, la experiencia me dice que es algo muy natural y la adicción lo convertiría en algo enfermizo, contrario a lo natural.
Lo del perfil mujeriego (dado a las mujeres) entra dentro de lo “natural” en algunos hombres. Yo no le daría mayor importancia.