Quizás nos estemos equivocando en algo al tratar este tema y es identificar a la Iglesia Católica como la única institución que ataca el aborto. Esto nos lleva a intentar poner de manifiesto las contradicciones en que pueda incurrir esta institución buscando, así, defender la aceptacón del aborto.
Sobre la admisibilidad legal (incluso moral) del aborto he escuchado tesis tanto a favor como en contra de otros muchos grupos, grupos que no son precisamente cercanos a la Iglesia Católica, y que se basan, para argumentar sus opiniones, en otro tipo de análisis.
Me llama la atención la disparidad de criterios existente en la legislación española, ya que si bien por un lado no se es persona (bla, bla, bla) hasta cierto momento, al no nacido se le tiene por tal para los efectos que le sean favorables (bla, bla, bla) y luego, sin embargo, se permite poner fin a su ¿futura? ¿hipotética? vida en ciertas condiciones.
Esto no me cuadra. Como tampoco me cuadra que personas interesadísimas en salvaguardar la vida (¿humana?) de un criminal peligroso se opongan con tanta saña a la pena de muerte y luego, cuando hablamos de alguien/algo que no ha hecho nada malo, sean tan generosas en la aplicación de ese mismo resultado.
No obstante, yo sí estoy a favor de la despenalización del aborto, aunque debido a mis dudas podría reconsiderar esta opinión en caso de que alguien o algo pudiera aportar algo nuevo. Lo que no me parece de recibo en ningún caso es que la continuidad o no del desarrollo de un proyecto de vida humana dependa enteramente de la madre.