Esto me recuerda el disgusto que me he llevado esta mañana durante el desayuno. Mientras me comía los cereales Kellogg’s Frosties 9 vitaminas y minerales, y por matar el rato me ha dado por leer lo que pone en la caja, y j.d.r, también son de Cataluña, ¿pero qué porcentaje de empresas pagan impuestos allí, el 80, el 85%...?, estoy asustado, estos últimos días he empezado a mirar en supermercados la procedencia de los productos y es increíble: en gel de baño, el 90% catalanes, hasta la Toja, que siempre pensé que era de Pontevedra, es catalán; también los suavizantes, detergentes, las Matutano, el Colacao y demás, pan Bimbo y Panrico, etc. etc. no me extraña que quieran administrar los impuestos que les estamos pagando, seguro que si yo fuera catalán también me parecería bien, pero como soy de Castilla la Mancha, una comunidad “pobre”, pues que quieres que te diga, intentaré comprar productos procedentes de comunidades más solidarias, que no quieran que salga el sol sólo para ellos. También el País Vasco y Navarra tienen un sistema de cupo, pero, aparentemente, no nos quieren vender todo lo que consumimos.
Perdonad que me haya salido del tema.
Ah, y como no soy militante de ningún partido, me pienso comer los cereales que aún quedan en la bolsa, para que no me tildéis de radical. Hasta luego amigos.