yo soy solo un pobre corderito que va a una cita a ciegas, y con poca experiencia en estos menesteres, pues en la primera cita, en la que relucia y explendoroso sol y se olian el aroma de las flores y se endurecia el torso de los prados, cuando mi corazón más inquieto estaba, me dejo plantado, comunicandome despues de varias semanas, que en septiembre me sorprenderia y estaria un ratito conmigo compatiendo una sonrisa y pequeñas miradas penetrante.
Pues con esta elocuencia yo ya estoy nervioso y espero estar a la altura