La portavoz del Poder Judicial informó ayer, en un comunicado. que nuestra Justicia se merece un aprobado raspadito!
Nuestra Justicia debería hacer todo los posible para alcanzar un 10, puesto que si la justicia no funciona no funcionará nada en este país.
Que hace el Gobierno con dichos datos, para cuando inyectará los medios económicos necesarios para que los trámites y sentencias se dicten más de prisa???
Es inconcebible que se tarde tanto en pronunciarse nuestros Juzgados sobre una sentencia!
Querido compañero, te doy toda la razòn pero debemos tener en cuenta ademas de la falta de medios econòmicos la coyuntura actual por la que pasamos, la crisis ha desnudado de un plumazo a muchos sectores y ha puesto de relieve carencias o debilidades que permanecían ocultas bajo el manto de las altas rentabilidades. En la Administración de Justicia, la recesión también ha tenido este efecto "destape", pero de forma contraria, ya que mientras el país se paraliza y muchas familias están con el agua al cuello, los tribunales no paran de registrar un incesante aumento de casos y lo que llega al cuello no es el agua, sino las pilas de expedientes.
El aumento de la litigiosidad por los cierres de empresas, las reclamaciones o las demandas por impago ha agudizado los déficits estructurales y ha puesto al sistema judicial en pie de guerra contra el Gobierno.
En este tour de penurias, los ciudadanos se encontrarán con uno de los peores grados de saturación del país.
El volumen de actividad se ha multiplicado y si en 2007, la media de casos pendientes por órgano era de 600, en el tercer trimestre de 2008 se rozaron ya los 700. Cien más en un solo año. Y, eso sí, no se trata de que hayan bajado las resoluciones. Éstas también han ido en aumento y se ha pasado de un promedio de 500 veredictos por juzgado al trimestre a los 530 y hasta 560 durante este año.
Por jurisdicciones, las peores condiciones se dan, con diferencia, en los juzgados de Menores, donde el deterioro es grave no sólo por el volumen de los casos pendientes sino también por el delicado ámbito que atañe. Tanto en el ámbito civil como en el penal, las tasas de estos juzgados destacan sobremanera, pero es sangrante en la primera: un 10,24, el nivel más elevado que registra el sistema judicial.
A esta congestión ordinaria se han sumado ahora otras dos extraordinarias que son consecuencia directa de la crisis: las de lo Mercantil y lo Social (en este segundo ámbito, la recesión ha agravado unas carencias latentes y denunciadas también desde hace tiempo). La saturación en el Juzgado de lo Mercantil, se ha disparado hasta el 6,7 como consecuencia de la multiplicación de los concursos de acreedores. Según un reciente informe del Consejo General sobre la incidencia de la crisis en los juzgados, los procesos concursales al trimestre han aumentado en un 15%, lo que implica un aumento medio del 433% con respecto a 2007.
En la jurisdicción de lo Social, la acumulación de asuntos se ha producido por la fuerte subida de las demandas por despido ( un 56% más que en 2007) y las reclamaciones de cantidades (un 19,2% más).
En la realidad que estamos viviendo, como decias tu compañero, un aumento de medios y estructuras seria lo necesario sino ya digamos perentorio.
Un abrazo
Maria