No sé cómo funciona el asunto. ¿Es el mismo profesor el que pasa las calificaciones o son los de Secretaría?
Tengo la sensación de que el tema no está demasiado bien organizado. Sólo es una ligera sospecha, una leve apreciación basada en la experiencia. Y no hablo exclusivamente de mis años en la Administración, en el idolatrado mundo de lo privado curiosamente pasa lo mismo o peor. Todo a última hora.
Cuando uno analiza estas especie de "instituciones" establecidas e inamovibles, te das cuenta de lo absurdo que es el género humano. El colmo de todo esto es que, aunque sabemos que es una imbecilidad, los exámenes en fecha y hora concreta, nos cuesta caernos de la burra. Ejemplo, esos paños calientes, cataplasmas propias del medievo, que son la evaluación continua y su gran incidencia en la nota.

Independientemente de que a mí no me gusta. Al final son horas y horas, para el trabajito de turno. Que tampoco es que...
Las fechas del examen debería elegirlas el alumno, dentro de un orden pero con un abanico de posibilidades, evitar las aglomeraciones (que no son pocas), las semanas cargadas con tanta prueba y el disparate que supone para todos,
todos. Poder uno organizarse la matrícula no sólo por cursos (LOS CURSOS EMPIEZAN EN SEPTIEMBRE, o en octubre, que no da tiempo después del verano..., Y NO SE HABLE MÁS!!!!), por meses, las pruebas, las clases, un trato más personalizado con los profesores...Pero para esto se necesita responsabilidad. Y ganas. Y algunas neuronas.
En el fondo de la cuestión, que es lo importante, la preparación del alumno, lo que realmente se lleva al mundo exterior, importa un pimiento. Así sales, ¿quién aprobaría hoy el examen de septiembre? ¿El profesor? ¿Seguro? ¿Y el de junio? ¿Y el del año pasado?

Eso sí, con el cinismo que nos caracteriza, todos salimos preparadíiiiisimos.
Mi plaza, mi cátedra, mi sueldo, mis libros, mi carrera, mi...mi...mi... Un mundo hecho por tontos egoístas. Y hablamos de la Universidad, nada más ni nada menos. Lamentable.
Esta sociedad tiene que cambiar mucho, pero para algunos tener un correo electrónico y una web es ya para que se les caiga el sombrajo. Así nos va, en general.
Y que conste que tengo una oposición aprobada y con plaza. Suerte. Eso sí, que me pregunten ahora

Esfuerzos puntuales, buena memoria...¿y todo lo demás? No importa. ¿Qué es una injusticia más entre tantas? ¿Y cómo hacerlo si no fuera así? En realidad no son más que obstáculos, más obstáculos para que muchos caigan, unos pocos los pasen si se atreven, y las conciencias queden tranquilas. La sociedad organizada.

En el fondo es que no damos para más, ni para arreglar el sistema ni para arreglarnos a nosotros mismos. Nadie puede extrañarse de la sinrazón, ni que de el lunes pete todo, de que no saquen las notas hasta el final. O de que a alguien se le agote la paciencia, y diga, hasta aquí he llegado. Eso ya podrá ser el martes o la semana siguiente. Qué más da, matricula más que abogado menos. Total, hay demasiados.