Fuera de coñas, este tema no es moco de pavo.
Desde luego que yo estoy en contra del mal trato animal. He visto algún que otro circo y también zoológico en el que los animales daban mucha mucha pena.
Pero no me convence la solución de prohibir. Hay otras medidas para impedir el mal trato, que se incrementen las inspecciones y se endurezcan las sanciones, llegando al punto de cerrar los establecimientos que no cumplan con la normativa. Claro que si consideramos mal trato al simple hecho de mantener en cautividad a un animal salvaje, entonces la solución es complicada.
Recuerdo cuando era un crío como alucinaba viendo a los animales en el circo o en el zoo. ¿Vamos a pribar a las nuevas generaciones de que puedan disfrutar de esa sensación? ¿Sólo los hijos de los millonetis podrán ver animales salvajes cuanto sus papis los lleven de safari a África? ¿Ésto cómo se come?
Ya digo, que soy sensible con este tema, especialmente con los acuarios, todavía tengo clavada la mirada que me echó una pobre belluga encerrada en un acuario de 4x4, desgarrador, pero, no sé, dudo que la prohibición radical sea la solución. Tal vez limitar el número de estos establecimientos y endurecer las normas para asegurarles a las especies el mejor trato posible.
Si nos ponemos en este plan, se debería inspeccionar a todo el que tenga una mascota en casa, que hay mucho jipilongui de éstos pro defensa de los animales que luego ni vacunan al perro.