En tiempos de crisis no hay mejor receta para mitigar los desastrosos efectos que tener distraído al personal. De ésto último tenemos más que suficiente.
Zp sigue sin dar con la receta mágica que logre enderezar el país, la tan negada crisis con sus "objetivos datos", ha pasado de la negación a su confirmación, si bien política efectiva no ha habido, el fondo estatal de inversión local no logrará revitalizar nuestra economía por razones de peso, sus efectos podrán ser balsámicos pero no curativos, la ocupación efectiva será de unos meses. Los dimes y diretes con los banqueros, tras la polémica inyección de fondos, las salidas de tono de Sebastián y las correcciones del boss no son el mejor espectáculo. Los despistes de Solbes y su guerra de cifras y datos económicos podrían pasar a la historia como la mejor forma de marear la perdiz a todos los ciudadanos. Zp necesita dar un golpe de efecto, remodelar su gobierno, dar una imágen distinta, enérgica, convencida, real y efectiva que sirva para no seguir perdiendo terreno en lo económico y que esté país levante cabeza, para lo cual necesitamos de verdadera política económica, no de parcheos. Polìtica económica de la mano de la oposición, de los banqueros, de la CEOE, de las Pymes, de los sindicatos, de todos.
No podemos olvidar que la oposición no gobierna a nivel estatal, pero sí a nivel autonómico y local. Su política debe ser clara y coherente en los ayuntamientos y autonomías con lo que predica a nivel estatal. La guerra interna del PP no se le puede achacar ni a la crisis económica, ni al gobierno de Zp, ni tampoco al oportunismo de Garzón. Garzón no ha cometido las graves irregularidades, presuntas actividades delictivas, que se les imputan a la gente del PP, ni tampoco ha espíado (que se sepa). Aguirre, Gallardón, Aznar (sí el que se fue, pero que sigue estando ominipresente, sea con su Faes o sus listas de invitados), alcaldes corruptos sean de Bobadilla o de Villalimpia de Arriba, empresas afines y Anacletos agentes secretos,etc, etc... le están poniendo la casa patas arriba al Sr. Rajoy, y sus espectativas cada vez se reducen más. Las próximas citas electorales de Galicia y País Vasco serán el termómetro que medirá el calado de todas estas acciones en el sufrido ciudadano, y que sin lugar a dudas, beneficiarán directamente al Psoe.
Con toda esta distracción, ejemplo de la sin-razón, del gobierno y desgobierno, ¿quién se acuerda de la crisis? ¿Nos tienen efectivamente entretenidos? Por desgracia en estos malos tiempos, tanto los que tenemos la "suerte" de tener trabajo, como aquellos que no lo tienen, la sufrimos, la vivimos, y esperamos que podamos superarla, la teoría económica nos dice que vendrá un nuevo ciclo que nos haga olvidarnos de esta pesadilla.
Dejémonos de demagogias, en este momento no se puede defender con argumentos serios lo que están haciendo nuestros gobernantes, sean estos del PP o del PSOE. Cero patatero.