Gracias...
No mira, ésta es una página: ¿de acuerdo?
Incluso, si quieres, puedes coger un muñeco más o menos como Franco y descargar toda tu rabia contra él. Y yo puedo hasta entenderlo. Pero yo, sin ser de piedra, no soy decididamente tan sensiblero. Me emociono con algunas cosas emocionantes, pero no exagero.
Y hay que decir que hay grados y grados: si por sensiblero igualara lo de Franco al GULAG como hacen algunos, eso me impediría captar el grado de horror que fue aquello, lo que tuvo de sistemático, etc.
Pero con gente madura como tú, en un diálogo sosegado, sí soy capaz de mirar aquello con algo más de profundidad. Y puedo decir que las metas de Franco eran de una gran cortedad de miras. Su planteamiento fue ultraconservador y fue, en cierto modo, otra chifladura, cuya única función era que el comunismo no alcanzara el poder, sin que fuera mucho más allá de ese planteamiento o de su persona. Sin tener en sí mismo, un proyecto que fuera mucho más allá de eso. En política, creo que sobra un poco lo de un enfoque excesivamente moralista: pues es tan rica y tan compleja, tan genial, tan sublime y al mismo tiempo tan canalla, que va mucho más allá de eso.