Groovyricardo, te ficho ahora mismo para mi equipo. BRAVO. Y no es que quiera yo defender ahora a los sindicatos a capa y espada. Lo único que puedo decir es que desarrollan una función social muy importante. Que son parte fundamental en la negociación colectiva. Que gracias a las organizaciones sindicales se han producido muchas conquistas sociales en cuanto a derechos de los trabajadores. Eso no implica que no debe exigírseles coherencia y que cumplan con responsabilidad la función que tienen encomendada: LA DEFENSA DE LOS INTERESES DE LOS TRABAJADORES.
Sinceramente, no creo que lo que éste país necesite en éste momento es echarse a la calle a manifestarse, porque sencillamente, eso no va a crear empleo, sólo conflictos y paralización de la actividad laboral y la producción. Sería inoportuno e irresponsable. Lo que sí sería oportuno y responsable es que los líderes sindicales intentasen aportar más, en cuanto a ideas y propuestas. HAY QUE PASAR A LA ACCION. ¿Porqué esperar a que te den trabajo, si puedes trabajar por tí mismo?. TENER IDEAS PARA CREAR EMPLEO PARA SÍ MISMOS. Es hora de ejecutar esos proyectos que tenemos en mente...
Vaya! gracias por tu apoyo Joaquín, bueno, yo básicamente también apoyo antes la negociación que el conflicto o la manifestación ( por algo estudiamos Derecho no?), y lo cierto es que hay muchos sindicalistas "de base" , gente sencilla y humilde, que hacen un gran trabajo callado y cotidiano informando de derechos tan humanos a sus compañeros como por ejemplo, cuántos días de permiso pueden pedir para atender a un familiar enfermo, derechos de los cuales no acostumbran a informar aquellos que "van a heredar la empresa", ¿verdad? Este trabajo honesto de gente honesta es lo que merece nuestro respeto y homenaje( ellos constituyen uno de mis acicates para terminar la carrera, de hecho), otra cosa es luego criticar tal o cual declaración de un gran líder sindical, pero como tú dices Joaquín, a día de hoy la labor de representación y defensa que hacen los sindicatos (ya sean mayoritarios o minoritarios) sigue siendo imprescindible.
Saludos.
Ante lo dicho por estos compañeros de foro me veo en la obligación de hacer una declaración “institucional”:
- La labor (teórica) de los sindicatos en las sociedades occidentales modernas es incuestionable. La defensa de los trabajadores, histórica y actualmente, requiere de este tipo de “mecanismos”, que hagan factible un equilibrio adecuado entre las partes sociales de las relaciones laborales.
- La labor realizada (real) por los órganos centrales de los sindicatos españoles, en los últimos meses, resulta cuando menos cuestionable (asunto que motivó la apertura de este hilo), teniendo en cuenta los intereses que han de defender, según sus propios estatutos, tales organizaciones.
- No cabe duda de que en tales organizaciones existen individuos que se ajustan a lo que son sus intrínsecas funciones sindicales. Mi reconocimiento expreso a los mismos (conozco a unos cuantos).
- Mi experiencia personal, como empleado público, me ha hecho poco receptivo a sus mensajes, sobre todo cuando he visto el “verdadero” interés de “mis” delegados sindicales, “mis” liberados sindicales y “mis” sindicatos representativos. Ejemplos:
o En el periodo entre elecciones sindicales solo se pusieron en contacto con los trabajadores para…. vender lotería de navidad de sus organizaciones.
o Tras obtener algún ascenso para ellos y determinada financiación para sus organizaciones, las reivindicaciones “se flexibilizaron”, hasta el punto que nada más se obtuvo de la negociación (tan “listos” ellos como la contraparte en la negociación).
o Pretendieron (sin conseguirlo, tras las “brillantes” gestiones realizadas anteriormente) movilizarnos cuando la contraparte, en la siguiente negociación, cerró el grifo de la financiación a sus organizaciones (los ascensos ya se habían consolidado). Además nos responsabilizaron a los trabajadores de no obtener resultado por falta de apoyo (¡hay que tener descaro!).
o Dependiendo de quién (léase partido político) esté en el poder, con independencia de que fueran unos u otros (léase PSOE-PP) los que nada otorgaron a los trabajadores, la conflictividad era diferente. Siempre había creído que defendían a los trabajadores, pero ahora sé que la defensa solo tiene un objetivo… ellos (léase liberados, cargos institucionales en el sindicato, financiación del sindicato, etc.).
Tras lo cual debe entenderse mi escepticismo respecto a la labor (real) que desempeñan los sindicatos españoles. No obstante reitero que he conocido liberados y sindicalistas realmente comprometidos, a los que incluso sus organizaciones han apartado por no “centrarse” en los objetivos (reales) del sindicato (no se les ocurrió otra cosa que defender las posturas de los trabajadores, ¡insensatos!).