Me ha parecido un debate, realmente interesantísimo.
Contestaré primero al mamotreto de Palangana:
Por alusiones (otra vez) cuándo y dónde he dicho yo que ser o sentirse progresista ("guay") sea que apoye a los nacionalistas en todo, o que yo me sienta nacionalista, ni en todo ni en parte, puesto que yo esa sensibilidad no la tengo, no soy nacionalista. Lo único que dije es que se PUEDE SER NACIONALISTA y perfectamente ser una persona cívica, democrática y la más legal del mundo, y estas personas, obviamente, tienen mi respeto como persona con unos valores democráticos inculcados y mínima cultura jurídica, que es lo que me considero. La sensibilidad la tengo, en todo caso, con quienes siendo personas cívicas, demócratas y respeten la legalidad vigente y se sientan nacionalistas.....cada uno puede sentirse lo que le da la gana, eso no es más que el derecho de la personalidad y la libertad ideológica.
Lo que siempre rechacé de manera abiertamente hostil, (tengo que decir esta palabra porque responde a la verdad) es que un catalán o balear autóctono, tenga por esa sola razón, más derechos que el que viene de Murcia y se establece ahí. Y me refiero al derecho de usar su lengua o al tratamiento institucional, no a si Pepe se encuentra con Juan y se hablan o dejan de hablarse en arameo. Palangana, en ese tratamiento desigual, es donde se asienta el concepto de raza superior. Concepto que fue acuñado aquí por Sabino Arana, lo que a su vez lo tomó de Prat de la Riba. Desigualdades jurídicas basadas en la raza y en el lugar de nacimiento, es lo que repetidamente han defendido socialistas, nacionalistas y PP y no por ello resulta menos rechazable. Es infinitamente rechazable y me merece por ello el mayor de los desprecios. Y el nacionalista, al menos este tipo de nacionalista, es el que defiende un concepto de raza superior o de mayores derechos por el sólo hecho de la raza o el lugar de nacimiento. Y si con las personas debemos ser piadosos, con sus errores debemos ser severos, sobre todo cuando esos errores implican el defender que A Autóctono tenga más derechos que B, emigrante, por el sólo hecho del lugar de nacimiento. Esto es lo que creo que algunos intentaron transmitirte y no pudieron o no supieron hacerlo. El que vale, o el que no vale, valdrá o no valdrá por sus hechos, tendrá o no más méritos en razón de sus hechos, pero nunca será aceptable que tenga más derechos o menos, por el solo hecho de nacer aquí o allá. Y esto es lo que se cargan los nacionalistas, los socialistas y sus marionetas nombradas por ellos y en algunos casos, pagadas con cantidades extra, aparte del ya de por sí generoso sueldo, a todas luces inmerecido. Y repito: inmerecido no por razón del lugar de nacimiento, sino por su trabajo. Podrán proclamarse lo que les dé la gana, sí. Y los que hemos estudiado sus doctrinas, también podemos verlo desde la pura discrepancia, desde la aversión o desde la abierta hostilidad y desde la mayor de las repugnancias.
Lo mismo puedo decir de las infraestructuras, aunque como haya apuntado 00000 a mí me puedan resultar favorables por ser una de las comunidades “agraciadas” con el nacionalismo. Rechazo abiertamente, que A tenga aseguradas las infraestructuras, haya o no dinero, nieve, llueva, haga frío o calor y B no, sólo por el detalle arbitrario y accidental del lugar de nacimiento o de residencia, no en función del interés general de España. Esto es lo que siempre rechacé, no ya desde la pura discrepancia, ni desde la aversión, sino de manera abiertamente hostil y desde la mayor de mis repugnancias. Cuestión distinta es que las personas merezcan buen trato y que, debamos ser piadosos no en el sentido de perdonavidas que se cree superior, sino en el sentido de que esa piedad siempre es lo justo y además mañana podemos necesitarla por nuestras torpezas y nuestros errores.
El resto, puedo decir que lo he leído con atención y creo que lo que he dicho anteriormente, vale igualmente para el siguiente párrafo tuyo.
En cuanto a lo que dices de presión, te digo que hay mucho más que presión: coacción.
Hoy en El Mundo, sale que algunos jugadores de España, no lucen en sus pueblos banderas españolas, por miedo a ser brutalmente agredidos. No, no es algo banal. No es banal lo que les pasa a Boadella, a Savater, etc. cuando dan conferencias, tampoco es banal el hecho de que en cualquier ciudad española, por ese racismo estúpido que hemos creado de los españoles contra nosotros mismos, si paseas con la bandera española, puedes ser brutalmente agredido. Sé perfectamente que a ti no te parece esto banal, pero aun así tengo que decirlo por la sencilla razón de que es la verdad.
Y en cuanto a lo de sembrar odios y provocar guerras, te digo igualmente que, una frase como la de El Mundo no es material suficiente ni de risa para semejante resultado. Es más: desde la destitución de Besteiro en el PSOE, hay una colección de frases del PSOE, (éstas sí, antológicas) y de hechos (éstos sí decisivos) que tuvieron lugar en 1934, tales como dinamitar la Catedral de Oviedo y el Instituto de Enseñanzas Medias, que sí son determinantes y de sobra suficientes para generar el clima bélico que estalló en 1936.