No te me quejes Jaquetón. Mira, yo estoy retrasando formular la matrícula para ver si, mientras tanto, Hacienda se digna a devolverme los euros que necesito para pagar el primer plazo. Guarda tu resguardo de haberla realizado, no te gastes el dinero que habías dispuesto en otra cosa y espera. Una de las virtudes que tiene la UNED es que, además de formarnos en las distintas materias que conforman la licenciatura, nos fomenta la SANTA VIRTUD DE LA PACIENCIA, esperando las notas, la respuesta a la injusta calificación de un examen, a la petición de una comisión de revisión, a la formalización de la matrícula, a su cobro, al uso efectivo de los cursos virtuales, a la actualización de las guías, a poder disponer de los programas de las asignaturas, aunque el curso haya comenzado oficialmente... No te quejes, acabarás en el santoral. Si ahí llegó el Santo Job una vez fallecido, tras pasar por estas duras pruebas unedianas, aspira a llegar vivo a los altares.