A ver si soy capaz de explicarme, Onaiplu...

Más que unas pautas para la resolución de los casos, la tutora intentaba ponernos en pie los casos de manera que, antes de ver que acciones eran aplicables, pudiésemos entender de lo que estábamos hablando. Quizá el método era un poco "infantil", pero a nosotros nos vino de perlas.
Consistía en:
- Tras leer el caso en la tutoría, lo primero era identificar las instituciones que había en cada caso. Es algo, desde mi punto de vista, sencillo, basta con una lectura más o menos detenida para saber de qué estamos hablando.
- Después, una vez identificadas también las partes (demandante, demandados, terceras personas), nos asignaba a los alumnos el papel de cada uno de ellos. Y entonces pasaba a preguntarnos: "a ver tú que harías si te vieses en ese caso?", "si éste te reclamase tal cosa, tú que alegarías para evitar que te perjudicase?", etc. Todo esto, sin recurrir a los conceptos romanos, es decir, en términos actuales. También nos iba enrevesando los casos con determinados supuestos, del tipo: "pero si en vez de reclamarte sólo tal cosa, si te reclamase esta otra, qué harías?". Y de esta forma, que parece en principio absurda para este tipo de asignatura, o para gente de nuestras edades, las cosas se te quedan grabadas a fuego.
- Finalmente nos explicaba que las decisiones que hubiésemos tomado en cada situación, tienen un nombre determinado para el Derecho Romano. Esto es: "Fulanito, tú que has dicho que demandarías a Menganito por tal cosa, pidiéndole tal compensación, que sepas que eso en Derecho Romano tiene un nombre, y se conoce como Actio xxxxxx".
No sé si me he sabido explicar, o si te servirá de ayuda... pero a mí me ha funcionado de maravilla. Apenas repasé los casos, y al salir del examen y revisarlos, comprobé que por suerte acerté prácticamente en todo...
Un saludo!