Yo me quejo de un país que cada vez que meten mano en algo es para complicarlo esterilmente. Como dice una compañera en otra sección, a la hora de la verdad la carrera se va a quedar en SIETE AÑOS, más una PRUEBA FINAL, o incluso la necesidad obligada de hacer un MÁSTER, es decir, 9 años totales y reales... y todo porque hay un colegio de abogados que va a lo suyo, es decir, a quitarse competencia de encima.
Me quejo de que no se cosulta para nada, articulando medios idóneos, a los verdaderos sujetos de esta reforma, los alumnos.
Me quejo de que no hay un análisis de lo que está pasando, sino un ataque fanático e inargumentado contra quienes no comulgamos con ruedas de molino. Es evidente que ha quedado de tiempos pasados una honda huella de sumisión (¡vivan las caenas!)
Me queo de una actitud general de la uned que puede hacer las reformas que se le imponen de dos farmos: intentando ayudar a sus alumnos o, por el contrario, complicándole aún más las cosas (y en este caso es complicándole las cosas).
Me quejo de que los miles de millones que el Estado asigna a la uned no se justifican examinando sólo a los alumnos.
Me quejo de una inflación innecesaria del nuevo programa de la uned; y de que si lo planteas alumnos determinados te gritan: ¡¡¡ ¿qué quieres un curso de la ccc?¡¡¡ cuando para nada no es tan necesaria esa inflación, y pongo un ejemplo, ¿sí tan necesaria es esa inflación, cómo luego se puede obtener el título sin tener estudiado civil de 4º?
Me quejo de que no se respeta el espíritu de Bolonia, y que se está haciendo una chapuza con los pases de los créditos de unas asignaturas a otras, porque ¿cómo el nuevo procesal II, que es un tocho increible puede representar 5 créditos?
Y en definitiva, me quejo... porque es mi derecho.