Lo he reconsiderado. Creo que es bastante conveniente que Economía y Hacienda se divida en dos carteras.
Bien pensado, así se asegura un criterio de especialidad. Además, sería una buena ocasión para reforzar la persecución al fraude fiscal, al no tener este ministerio que preocuparse de otra cosa que hacer que las cuentas cuadren.
Asímismo, Rajoy se beneficia al poner a Montoro como diana para todas las críticas y frustraciones. Al fin y al cabo, será él quien diga cuánto se recorta y de dónde.
Saludos.