Una batalla pendiente que tiene España, es la del fuero procesal.
Ejemplos:
1. Un juez como Garzón, que fue exculpado por lo del Santander y absuelto por su esperpento antifranquista, con toda seguridad habría sido condenado, si no le hubiera tocado un Tribunal controlado por el psoe. Ahí jugaron claramente con los jueces comprados: véase el lacayo Arrieta o el genufiexo Carlos Granados.
2. Pepiño y Griñán. Cualquier juez de oposición y que no fuera puesto a dedo por los partidos, los habría condenado. En cambio tratan de escapar recurriendo al archicorrupto juez prevaricador, Carlos Granados. El primero lo consiguió y el segundo va camino de hacerlo.
3. Partidos de ETA. Un juez profesional, los habría ilegalizado, pero el prostitucional que está puesto a dedo por el ppsoe, en vista de que está vigente el vergonzoso pacto con los etarras, prevarica por motivos políticos inconfesables.
Por eso, deben desaparecer los fueros y los jueces digitales. Sin que eso desaparezca, es imposible que haya regeneración.