el islam no es peor que el cristianismo , ni por asomo , el problema es el uso que hacen los hombres de la religion .La mayoria de las imposiciones que quedan hoy en el islam tenian su logica en aquellos tiempos . He leido el coran y no he visto la imposicion del velo .Si quieren llevar velo que lo lleven , ahora si le es impuesto no , no? Pues entonces hagamos como en Francia en instituciones publicas , ni velo , ni crucifijo y san se acabo , no ?
Pues yo creo que sería más enriquecedor precisamente lo contrario, sí una quiere llevar velo que lo lleve y si otros quieren ir con crucifijos que lo hagan, para eso es un estado aconfesional.
Estoy de acuerdo con Mirella, todas las religiones tienen su propias barbaridades.
Los musulmanes se pierden el Rioja y el Jamón.
Los Testigos de Jehová la diñan por no permitir las transfusiones de sangre.
Los católicos no podemos mantener relaciones antes de casarnos.
¿Si a vosotros os diesen a elegir entre estas tres cosas con cuál os quedaríais?
Aunque si te detienes a leer un poco el corán encontrarás el siguiente texto:
SURA IV 38
Los hombres son superiores a las mujeres, a causa de las cualidades por medio de las cuales Dios ha elevado a estos por encima de aquellas (...) Las mujeres virtuosas son obedientes y sumisas (...) Reprenderéis a aquellas cuya desobediencia temáis, las relegaréis en lechos aparte, as azotaréis, pero tan pronto como ellas os obedezan, no les busquéis camorra. Dios es elevado y grande.
Ejem...
También es muy interesante la ley de los celos de nuestra biblia:
Números 5
Habló Yavé a Moisés diciendo: (...) Si la mujer de uno fornicare y le fuese infiel (...) y se apoderase del marido el espíritu de los celos háyase ella manchado en realidad o no se haya manachado, la llevará al sacerdote y ofrecerá por ella una oblación (...) el sacerdote hará que se acerque y tomará del agua santa en una vasija de barro y cogiendo un poco de la gierra del suelo del taberáculo, la echará en el agua (...) y la conjurará diciendo: (...) si te descarriaste y fornicaste, infiel a tu marido, contaminándole y durmiendo con otro, hágate Yavé maldición y execración en medio de tu pueblo y séquense tus muslos en hínchese tu vientre , entre esta agua de amldición en tus entrañas para hacer que tu vientre se hinche y se pudran tus muslos (...) y hará beber a la mujer en el agua amarga de la maldición....
Y digo yo ¿No sería más fácil divorciarse?
En fin, que en todas las casas se cuecen habas.