Bien , no puedo competir; ni dispongo de un partido que me proporcione "masticados" los hechos que supuestamente apuntalen mis afirmaciones , ni dispongo de tiempo para buscar tales hechos por mi mismo (escribo entre pañal y pañal, carrera a la guardería y vistazo al manual de "tú amigo" Souto Paz), así que vierto opiniones que si son rebatidas, que le voy a hacer rebatidas quedan.
Ahora bien, las fechas a las que te refieres son de un periodo muy concreto en el cual se mantenían esas reuniones o contactos y se veía por donde podían ir las cosas. Quizá por eso las víctimas no tenían problema; se trataba de intentar que dejara de haber víctimas, y para eso siempre ha de haber manga ancha con los responsables, pero no a cualquier precio, si las exigencias que se piden como contrapartida pasan de las movilizaciones carcelarias a otras poco asumibles (libertad de terroristas con delito de sangre, p.e.) pues se termina la cuestión ; si voy a comprar un boli y me piden 30 euros, pues me voy, pero yo a por el boli fui. Quiero decir que hay exigencias que determinan el fin de cualquier contacto, y eso es con lo que estoy de acuerdo, con eso y con que haya esos contactos (sino no sabríamos si las exigencias son asumibles o no). Quizá por eso las víctimas y yo (nosotros) no viéramos problema en ello. Repito fíjate en el periodo tan concreto que marcan esas fechas, un periodo muy corto; mienttras se intercambian opinones, peticiones y exigencias y se evalua si son o no asumibles. Ante eso podemos tener paciencia.
Pero con lo que nos cuesta más tener paciencia es con estar en esta situación 2004, 2005, 2006, 2007; y estar en ella independientemente de lo que exijan a cambio. Puedo tener paciencia con el Gobierno decida tantear la debilidad de ETA para tratar de conseguir su fin en una mesa (dependiendo de las condiciones claro), pero seguramente no la tendré con un gobierno que se pasa 4 años dedicando palabras a Otegi (mira como aprendo) o de Juana o incluso Ternera, que nunca me dedica a mi. Seguramente tendré poca con un Gobierno que habla de "accidentes", con un Gobierno que niega extorsiones cuando existen o que minimiza los ataques a ferreterias y habla de "baja intensidad", con un Gobierno que se situa equidistante de mi y de un terrorista para llamarnos a ambos extremistas (haciendo una humillante comparación, que ningún gobierno se había atrevido jamás ni a insinuar), y así aparecer él en el término medio, la virtud, poca paciencia con un gobierno que tiene esa actitud, no en un momento puntual durante unos contactos, sino de forma continuada como una política general de su mandato, que lo mismo ocurre en 2005 o en 2007, apesar de lo que han hecho en el entre tiempo los "hombres de paz".
Un Gobierno comprendió que no se puede pasar por tal responsabilidad sin intentar el fin del terrorismo por la via de la palabra, el actual no ha comprendido que cuando eso se demuestra inútil hay que cambiar la estrategía y nunca dejar de lado a quienes son las víctimas directas, que se abandonan a la confianza en el Estado para luchar por ellos y para satisfacer su ansia de justica, evitando con un comportamiento democrático, digno, y muy a tener en cuenta la venganza, por creer en la justicia y en la labor policial.
Evidentemente, sí hay diferencias.