Me parece equivocada y absurda la política lingüística seguida en las comunidades con otra lengua propia además de la castellana, aunque quisiera ver varios puntos; en primer lugar, cuando hablamos de polémicas por la lengua, solemos pensar en Cataluña y en el País Vasco, pero vamos a ver qué ocurre en la nada sospechosa Comunidad Valenciana: si elegimos el modelo educativo, solo en castellano, nos encontramos con el ABSURDO de que en cuarto o quinto de primaria, la asignatura, conocimiento del medio se imparte EXCLUSIVAMENTE EN VALENCIANO, eso por un lado.
Por otra parte, tenemos el caso de muchos niños catalanes, perfectamente competentes en catalán, que por circunstancias de la vida laboral de sus padres tienen que ir a vivir a alguna comunidad castellano parlante y SON INCAPACES DE SEGUIR EL RITMO DE CLASE por incompetencia lingüística en castellano. Por supuesto, los responsables de esta situación no son afectados puesto que los RESPONSABLES EDUCATIVOS ya se encargan de que sus propios hijos estén perfectamente educados en castellano, inglés y la lengua de turno, POR SUPUESTO PREVIO PAGO, que no todas las familias pueden asumir.
Por último dejar claro que por supuesto que el castellano no está amenazado por las disposiciones más o menos folklóricas de Quintanas, y similares, su pujanza se basa en sus hablantes, no en las leyes que intenten imponerlo, que por otra parte sólo producen rechazo hacia la lengua que se pretende proteger, ahí está el rebote que en su momento se cogió el señor Pujol, porque la gente no rotulaba las cartas de los restaurantes en catalán.
Qué afán por inmiscuirse en la vida de las personas de toda esta gente, en fin, será que tiene que ser así.