En mi modesta opinión este debate está mal enfocado de base. ¿ Dónde dice que el Abogado tenga que ser justo o alcanzar el resultado material de la justicia ?
Esa misión no es del Abogado, y sí del legislador cada vez que incorpora una norma al OJ (justicia, necesidad, oportunidad etc) y del Juez a la hora de aplicar el Derecho (equidad, principio de individualización de la pena, medidas cautelares, principio de legalidad material y de procedimiento etc etc). Alcanzar la justicia son palabras mayores y no es la misión primaria del Abogado, aunque evidentemente ayuda su figura a alcanzar ese valor.
En cuanto a la ética y moral necesariamente no puede ir más allá del cumplimiento de la legalidad, de lo establecdido en el Estatuto de la Abogacía, no indicar cosas como "está ganado, no se preocupe" (porque aunque teniendo razón ley en mano y siendo un Abogado de experiencia, y aun exponiendo brillantemente puede ser que el Juez sea bastante malo o incluso un prevaricador), no regalar los oidos ante pretensiones infundadas, ser sincero, ir hasta el límite legal que permita una norma en defensa de su cliente (pero no traspasarla) y poco más.
Por otro lado, el Abogado es testigo de las garantías del Estado de Derecho, que el Juez es el que debía ser, que en el juicio oral no está el que estaba en la instrucción, que los testigos y peritos son verdaderamente imparciales, que la confesión no se sacó en comisería a mamporros, que el ADN lo practicó personal cualificado y habilitado para ello, que se permitieron todas y cada una de las manifestaciones del derecho de defensa, representación, asistencia etc
¿Qué abogado es más justo y más ético, el que defenderá a Renfe, o el que defenderá a las víctimas del atropello del tren?, pues no tiene fácil respuesta, y lo más que se puede indicar es que cada uno esté dentro de la legalidad y vele por los intereses de sus respectivos clientes.
Eso creo yo.Un saludo.