Toda la cúpula judicial del 11-M, Faisán, (en adelante la garzonería) etc. de la Audiencia Nacional, presentes en la toma de posesión de Camacho. Todos condecorados por su antecesor. ¡Naturalmente!
Por supuesto, no todos están directamente implicados, pero sí que al menos todos están en la pomada de la manipulación de pruebas y de una forma de justicia que son el ejemplo de lo que no deben ser los jueces y fiscales: marionetas del poder y encima subvencionadas, pagados sus gastos de lujos, medallas pensionadas del 10% de sueldo.
Así como muchos seres diabólicos y despreciables son curas invertidos, así como los nacionalismos son la antiespaña (y los que pactan con ellos, también, aunque les duela), la garzonería puede ser definida como la antijudicatura.