El Supremo acaba de derogar el art. 446 del Código Penal. Con lo cual, el delito de prevaricación sencillamente, NO EXISTE. Todo juez podrá aplicar de nuevo su “concepto romántico” y politizado de la Justicia, aunque sea opuesto al que claramente resulta de las disposiciones legales. Y añado que con esta nueva jurisprudencia en mano, (“doctrina Garzón II”) debía haber sido absuelto en el otro caso. Con la “doctrina Garzón I”, se apelaba a una ortodoxia jurídica… ¡de la cual se han apeado los propios jueces del TS a las primeras de cambio! Es decir: ¡¡que condenan en Garzón I, por lo que ellos mismos hacen en Garzón II ¡!
Mi consejo es que todos los españoles procuren hacerse ricos, para poder tener maletines para sobornar a jueces y sicarios para amedrentarlos. Esa es la táctica que hay que seguir a la luz de los últimos acontecimientos judiciales.
¡Que a los jueces! ¡Al PPSOE!