Ay señor...
Pero eso son asociaciones, cosas que libremente decides hacer porque se supone que te gustan o que te llenan, cosas vocacionales...
Por muy vocacional que sea lo que hagas, necesitas recursos para sobrevivir. Tienes que comer, pagar la luz, el agua, la ropa, el colegio de tus hijos, etc. ¿Y que usas para conseguir esos recurso? Tiempo = trabajo. Y cada vez más para conseguir menos, por cierto. Para dedicarse a esas cosas vocacionales o te sobra tiempo, o se lo escatimas al trabajo. Resultado en vuestro modelo: Sólo el que tuviera las habichuelas aseguradas por otro lado se podría dedicar a hacer esas "cosas vocacionales".
Por otra parte, si tú reivindicas algo de la profesión, tiene que ser porque la ejerces y la entiendes y por la cuenta que te trae.
No la ejerzo, pero la entiendo.
Sin embargo te doy la razón en que es por la cuenta que me trae. Cuando un delegado sindical me tiene que defender ante la empresa, prefiero que esté al 100% y no medio dormido porque ha trabajado de noche, o de mala ostia porque se ha levantado a las 5 de la mañana y le duele la espalda de levantar tubos de acero. Evidentemente no me va a atender igual.
Ya te permites el lujo de presuponer cosas, me vas a permitir que lo haga yo también. Por una vez me voy a poner a tu altura.
Yo no se a que te dedicas, pero te pondría a trabajar sólo durante 3 meses a turnos en una fábrica para que supieras lo que es. Es muy bonito hablar de teorías desde un escritorio no habiendo levantado nada mas pesado que una pluma. Así tambien me sobraría a mí toda la energía del mundo para dedicarme a tus "cosas vocacionales".
El accidente laboral más grave que has tenido en tu vida habrá sido graparte un dedo, y quizás ni eso.
Que en los sindicatos hay mucha caca, me lo habrás leido aquí muchas veces. Pero sólo ha habido una época en la historia en la que han existido obreros sin sindicatos ni partidos políticos de corte obrero y se trabajaban 18 horas. A ver si ahora va a resultar que se consiguieron la jornada de 8 horas y el derecho a la huelga por obra y gracia de dios y de la patronal.
Por otra parte, quizá debería espiritualizarse la política, en el sentido de que el que trabaje en un cargo político, lo haga por vocación y que sólo cobre el finiquito. Es decir: que los jueces propongan tres tipos de finiquito y que, la ciudadanía en un referéndum decida qué finiquito de esos tres que proponen los jueces, le da.
Quizás el problema es que espiritualizas demasiado sin acercarte a la realidad (salario, jornadas de trabajo, condiciones de seguridad e higiene...) de los trabajadores. Lo que estás planteando es un sufragio censitario sin llamarlo así. El que tenga suerte de tener dinero o de trabajar con papeles se podrá dedicar a la política. El que vuelva a casa reventado de mover sacos de cemento, que se joda. "¡Que hubiera estudiado!"
Un saludo.
Un saludo.