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LoginLa Dirección General de Tráfico ha comenzado a estudiar la posibilidad de matricular las bicicletas, obligar a los ciclistas a obtener un permiso de circulación y establecer la necesidad de disponer de un seguro. Estas ideas surgen en el tramo final del mandato del organismo, dirigido por María Seguí, tras los encontronazos con los colectivos ciclistas por su oposición a que el nuevo Reglamento, aún en tramitación, impusiese el casco obligatorio a los pedaleantes. Como en aquella ocasión, todas las organizaciones pro bici han mostrado su oposición a unas medidas “inauditas en Europa”.
“La DGT quiere contar con tu opinión”. Con este encabezado, el organismo, dependiente del Ministerio del Interior, mandó, hace unas semanas, una encuesta a diversos colectivos y usuarios de la bicicleta. En ella, varias preguntas pedían de manera sutil la opinión, favorable o desfavorable, a imponer por ley la obtención de un permiso de circulación ciclista; a la obligatoriedad de matricular la bicis y a la necesidad de poseer un seguro. El pasado fin de semana, el organismo convocó un encuentro con ciclistas para profundizar en el tema y en el que la subdirectora general de Intervención y Políticas Viales de la DGT, Mónica Colás, reconoció que esas ideas se estaban estudiando.
“No solo la encuesta estaba sesgada y carecía de rigor científico sino que el encuentro buscaba defender obligaciones e impuestos a los ciclistas inéditos en el resto de países de Europa”, denuncia Manuel Martín, de Conbici (Coordinadora en defensa de la bicicleta), que agrupa a la mayoría de asociaciones pro bici de España. Una opinión que comparte la Asociación de Ciclistas Profesionales. “Nos parece muy extraño que la DGT, al final de su mandato, siga proponiendo medidas que han sido ya rechazadas por el Congreso de los Diputados”, se quejan en un comunicado conjunto ambos colectivos. “Podrían haberlas incluido en la reforma de la Ley de Tráfico [de la que deriva el Reglamento de Circulación, cuya aprobación está paralizada por Interior], que aprobaron recientemente”.
Con el objetivo de “establecer nuevas líneas de trabajo para promocionar la bicicleta asegurando su seguridad desde el consenso, escuchando al amplio y heterogéneo mundo ciclista”, Mónica Colás inauguró el encuentro del fin de semana resaltando la “preocupación” de la DGT por la convivencia entre la bicicleta y el resto de vehículo y por los datos de siniestralidad. En 2013, los usuarios de bicis se vieron implicados en 5.835 accidentes (un 7% del total) en los que fallecieron 69 ciclistas, 24 de ellos en ámbito urbano y 45 en carreteras interurbanas, donde el casco es obligatorio. En esos accidentes hubo 646 heridos graves y 4.779 leves.
“Lo que deberían hacer [desde la DGT] es consensuar con el sector, pero medidas que realmente fomenten un ciclismo más seguro”, añaden desde Conbici, que como protesta por el trato de la DGT hacia el colectivo no acudió a la reunión aunque sí lo hicieron miembros de la coordinadora a nivel personal. En esa cita se evidenció la necesidad de implicar a los colectivos de pedaleantes en la elaboración de políticas de fomento de la movilidad ciclista, como hacen en los países de Europa que despuntan en el uso de la bici así como la necesidad de un nuevo paradigma en el que la movilidad sustituya al derecho a llegar en coche a cualquier lugar, reclama este colectivo.
“Es necesario tomar iniciativas valientes y decididas, como otorgar a la bicicleta el papel de vehículo preferente y otras encaminadas a aumentar el número de bicis en nuestras ciudades. Se pueden aplicar prácticas tanto nacionales como de ámbito urbano probadas en otros países en lugar de sacarse de la manga normas inauditas en el entorno europeo”, concluyen desde Conbici.
