A Antonio Miguel Carmona lo utilizó el PSOE como caballo de troya para conseguir los pactos con Podemos. Después el guapo lo ha arrinconado como un muñeco viejo y "el melenas" lo ha llamado públicamente subnormal. Pero claro, eso no lo ve absolutamente nadie, con eso ya contamos. Este es el resultado y el pago que ha recibido este hombre.
Y es una verdadera pena, porque es una persona muy inteligente y lo único que afea un poco la historia es que se decantara ideológicamente por un partido que los utiliza a su conveniencia. Para muestra lo que pasó con Tomás Gómez, otro que apuntaba maneras, a mi juicio, de líder y se lo quitaron de encima por la vía rápida.