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LoginTerminar con la injerencia política en la Justicia. Es uno de los mensajes que Albert Rivera repite machaconamente en las últimas semanas. La despolitización del poder Judicial es uno de los mantras de Ciudadanos. En sus propuestas, el presidente del partido naranja está decidido a "acabar con la impunidad. No podemos tener un sistema de Justicia de amiguetes que acaben indultados", ha reflexionado en un coloquio-almuerzo en el Club sigo XXI. "Soy partidario de que no haya indultos por casos de corrupción política", ha afirmado.
Rivera, que ha respondido a preguntas durante casi dos horas, ha expuesto que no quiere un país "donde mi presidente, al final del ciclo de la Justicia, pueda decir: 'No te preocupes, que ya te salvamos nosotros'". Y para que quedara claro a lo que se refería ha puesto un ejemplo: el Gobierno de Rajoy indultó en 2012 a dos condenadosde CiU en el caso Treball por prevaricación. Ambos fueron condenados en marzo de 2009 por la Audiencia de Barcelona, que consideró probado que urdieron un plan para desviar 7,6 millones de las antiguas pesetas del Departamento de Trabajo mediante la contratación de estudios inútiles o plagiados a empresarios afines.
Ante las críticas recibidas, el entonces ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, se defendió alegando que los indultos eran por razones humanitarias.
Desde Ciudadanos consideran que este tipo de actuaciones por parte del Gobierno distorsionan el sistema judicial. Por ello, por ejemplo, en su programa para las elecciones catalanas plantean una reforma del sistema de indultos, "posibilitando su concesión exclusivamente cuando exista un informe favorable del Tribunal que juzgó los hechos. Modificar la regulación de la suspensión provisional de la ejecución de la pena en caso de solicitud en caso de solicitud de indulto, de la que se hace un uso exclusivo".
