No puedes ver los enlaces.
Register or
LoginEl líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido a las restantes fuerzas políticas que "no bloqueen" la posibilidad de formar Gobierno al partido que consiga "reunir más escaños". Así lo ha manifestado en el Foro organizado por EL MUNDO.Sánchez se refería con estas afirmaciones a la hipótesis de que un partido, como el PSOE, consiga aglutinar mediante pactos y alianzas un mayor número de escaños a su alrededor, tal y como sucedió con el pacto que alcanzaron Sánchez y Rivera tras el 20-D.Pese a ello, ha asegurado que él no facilitará un posible Ejecutivo del PP aun cuando este partido sea el que alcance el triunfo en los comicios. "Es algo que no me planteo", ha afirmado. Pedro Sánchez habla siempre dando por supuesto que será él quien alcance la primera posición y, en ese caso, asegura que frente a los posibles pactos que haya que trabar, él "no vetará a ninguna de las fuerzas políticas del cambio", lo que, de hecho, implica marginar de primeras al Partido Popular, la formación a la que él considera paradigma del inmovilismo. El líder del PSOE mantiene su aspiración de ser la fuerza victoriosa el próximo 26-J, pese a que todas las encuestas le sitúan en segunda e incluso tercera posición por detrás de Unidos Podemos.Según Sánchez, el socialismo "va a mejorar resultados y estará en mejor posición para formar Gobierno". Frente a los resultados que arrojan los sondeos y que no le son favorables, Sánchez ha replicado: "Los españoles quieren más al PSOE que las encuestas demoscópicas".El aspirante a La Moncloa del PSOE se ha mostrado especialmente esquivo cuando se le ha preguntado insistentemente sobre su futuro político: "Mi futuro lo decidirán primero los españoles y luego los militantes. Yo aspiro a volver a presentarme a la secretaría general del PSOE como presidente del Gobierno".El candidato socialista, que insiste en que él es un "político transparente" que "hace lo que dice", ha afirmado que nunca nadie le ha presionado, que ningún poder económico se ha dirigido a él para intentar redirigir los votos del PSOE.En relación con la situación interna que se vive en el PSOE ha insistido en que "las críticas se deben asumir como algo normal. Somos un partido de izquierdas en el que hay debate". En su opinión, la contestación interna que existe respecto a su liderazgo no les hace más débiles, sino todo lo contrario.Y con la vista puesta en el baile electoral en el que se entrecruzan las parejas en función de las circunstancias, ha recalcado que, en su opinión, "el mejor jefe de campaña de Pablo Iglesias es Mariano Rajoy". En ese sentido ha vaticinado que si el PSOE logra ser la fuerza más votada, el "ala moderada" de Podemos, encabezada en su opinión por Iñigo Errejón, "se impondrá" sobre los más radicales como Iglesias y Juan Carlos Monedero.Acuerdo con PodemosEl líder del PSOE insiste en que Errejón es una persona "mucho más proclive al acuerdo". Y ha insistido: "Las propuestas de Iglesias sobre sillones eran para bloquear cualquier acuerdo". "Iglesias nunca tuvo un problema de contenidos respecto al pacto con Ciudadanos, su problema era tener que votar a la Presidencia a un candidato socialista", ha afirmado. Él insiste en que el líder de Podemos siempre quiso centrar el debate en "una cuestión de sillas". Así, Sánchez ha evitado referirse a la posibilidad de que Iglesias pudiera llegar a ser su vicepresidente. Sólo acepta la hipótesis en el caso de que las negociaciones versaran desde un principio sobre contenidos y políticas. En su opinión, el secretario general de Podemos mantiene una profunda "desconfianza" respecto al PSOE. "Él en lugar de tender puentes lo que quería era volarlos", ha precisado. Girando el foco hacia su derecha, para el candidato socialista es "ciencia ficción" pensar que el PP pudiera llegar a apoyarle para evitar que el Gobierno se conformara con el ingrediente de Podemos.Refiriéndose ya a Venezuela, ha repartido críticas hacia todos los adversarios: discrepa radicalmente de la posición de Podemos, demasiado ambigua cuando no connivente con el régimen chavista; afirma que él, en lugar de Rivera, no habría hecho hoy un viaje a Caracas susceptible de generar más problemas que soluciones, y arremete contra Rajoy por "instrumentalizar" el problema hasta el punto de convocar un Consejo de Seguridad Nacional para abordar oportunamente la cuestión.En el terreno económico, Sánchez ha acusado a Rajoy de "mentir". Insiste en que la situación económica del país "no da para hacer rebajas de impuestos" como está prometiendo el líder del PP. "Lo que hará mi Gobierno", ha dicho, "será ir a Bruselas" para pactar un nuevo calendario de cumplimiento del pacto fiscal. Él cree que el principal problema se encuentra en el déficit de la Seguridad Social para lo cual lo que resulta imprescindible es abordar la sostenibilidad de las pensiones algo que, según él, podría conseguirse con un "recargo de solidaridad" sobre una "cesta de impuestos" no sobre una o dos figuras tributarias concretas.Sánchez mantiene el principio de "justicia fiscal" que incluye desplazar una parte de la carga fiscal del trabajo hacia la riqueza. Para el líder socialista cualquiera que gane 80.000 euros puede ser calificado, no como rico, pero sí como clase media-alta. "La clase media y la clase baja de nuestro país, no verá con nosotros una subida de sus impuestos", ha asegurado.En relación con el desempleo, ha vuelto a insistir en la necesidad de crear "puestos de trabajo con derechos", algo que, ha recalcado, es justo lo que no garantiza la reforma laboral que, según el PSOE, debería ser derogada.Sobre la Lomce, Sánchez ha propuesto "paralizarla" y empezar a "construir un nuevo pacto educativo" que incluya la rebaja de las tasas, el aumento de las becas, el incremento de la plantilla de profesores y un mayor control estatal sobre el sistema de conciertos.