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LoginEl analista Jaime Miquel es un adicto a la política que se mete demoscopia con la aguja de los gráficos. Tiene aspecto de esqueleto cabalgando encima de las cuatro furias, una por cada partido, y cuando habla de política se agita como un cuervo que se escurre el agua de las plumas. Enseña los dientes a todos los partidos. No se casa con nadie, pero da por muertos al PP y al PSOE.
Atribuye los resultados del 26J a la mala praxis de los candidatos de Ciudadanos y Podemos, pero da por agotado el proceso que unos llaman Transición y él tacha de posfranquismo. Que es uno de los analistas más afinados de España se demuestra con su libro 'La perestroika de Felipe VI', publicado antes de las últimas autonómicas, donde clavaba con exactitud los resultados de las elecciones del 20D.
Se reúne con nosotros para darnos su lectura del 26J y sus percepciones de lo que viene después. Durante la conversación, su voz pasará de un tono que recuerda al del humorista Eugenio hasta convertirse en un calambre de risa amenazante.
P. En un debate celebrado en 'La Tuerka' tras las autonómicas de 2015, usted abroncó a Ramón Espinar (Podemos), que dibujaba claramente la línea de confrontación con Ciudadanos que se convertiría en línea roja tras el 20D. “Vosotros sois aliados naturales”, le recriminó usted. La candidata de Ciudadanos presente en la mesa tenía una actitud mucho más próxima a la suya: “Nosotros queremos sentarnos con Podemos”. De esas ganas de concordia ya no queda nada en Ciudadanos y en Podemos nunca las hubo. ¿Cree que la ética de la confrontación ha sido el freno de la nueva política el 26J?
R. Completamente. La nueva política está retratada en el bar El Cuco de Nou Barris, en el programa de Jordi Évole. Allí, Iglesias y Rivera se dicen el uno al otro por lo menos 14 veces “estoy de acuerdo”. Ahí hay dos fuerzas políticas emergentes que hacen viejo todo lo demás. Ahora, los dos han caído en esa ética de la confrontación hecha a imagen de los mayores, y los dos se han equivocado por completo.
P. ¿Qué hubiera sido distinto si se hubieran puesto juntos enfrente del PP y el PSOE?
R. Si se hubieran reconocido el uno al otro como los nuevos, lado izquierdo y derecho, a los viejos los habrían triturado. Esto lo digo con los datos electorales en la mano. El proceso habría sido distinto. Pero ese “vosotros sois el IBEX” de Iglesias, o la decisión de Rivera de irse a Venezuela para cargar contra Podemos, propicia que un partido que hace política Le Pen, el PP, adquiera un papel central, moderado y sensato, en tanto que el radical, el intransigente, el de la confrontación está siendo Rivera, que se pasa toda la campaña en el populismo y el inmovilismo.
P. Usted ha escrito que ni Podemos ni Ciudadanos han entendido dónde está realmente su electorado.
R. Es que no tienen ni idea, se han olvidado. El 15M iguala al PSOE y al PP como dos familias políticas apoltronadas en el poder en España. PP y PSOE son los responsables, ambos, idénticos, de la situación que tenemos. La nueva política tendría que haber sido una ruptura con esas dos familias, pero tanto Rivera como Iglesias se olvidan por completo. Se enfrentan entre sí en lugar de unirse estratégicamente para destruir a sus verdaderos rivales, a los responsables de esta ruina. Cuando Iglesias dice que Zapatero fue el mejor presidente de la democracia, está traicionando a su electorado.
P. Está apuntando al elector del PSOE y abandonando al elector del 15M, ¿no?
R: A ver: ¿de dónde se cree Iglesias que han llegado los 5,2 millones del 20D, quitando las confluencias? Esos 5,2 millones son jóvenes que salieron huyendo del PSOE y cayeron en la abstención y el 15-M. Si tú dices que Zapatero es el mejor presidente, el electorado de Podemos dice: “Pero si este es el tío que nos dejó sin un duro, si este es el tío que hizo las barbaridades, los aeropuertos sin aviones; si es cuando se llevaron en baúles, no en maletas, el futuro de nuestros hijos, ¿cómo que el mejor presidente de la democracia? ¡Un Bambi al frente de la España del pelotazo!” Hay votantes del PSOE que habían ido a Podemos precisamente por culpa de Zapatero. En 2010, se marcharon despotricando del PSOE, en 2011 estaban haciendo el 15M, luego votaron a Podemos en las europeas y desde entonces están ahí dando la vara. Ahora oyen que Iglesias dice eso de Zapatero...
"Hay votantes del PSOE que habían ido a Podemos precisamente por culpa de Zapatero"
P. Entonces, ¿la campaña de Podemos ha fracasado por los errores de la dirección o del candidato?
R: Las aguas acaban mezclándose, pero el candidato ha sido tremendamente malo y debería largarse porque no ha sabido aprovechar el potencial de su sector electoral.
P: ¿Cree que el resultado les ha pillado por sorpresa?
R: No, ellos tenían una estimación de 5,6 millones. Iban bien, hasta que despega Pablo Iglesias, hasta que un iluminado habla de empate técnico con el PP. Por un lado, el debate afloja las tuercas de la amalgama plurinacional, que es el suyo, diciendo que eso ya no es línea roja. Ahí empieza a perder votos, por ejemplo cae perjudicado Domenech (En Comú Podem), que estaba por encima del millón de votos. También daña los resultados de las Mareas en Coruña y Pontevedra. El electorado de Podemos en Cataluña, por ejemplo, dice: ¡tú estás negociando con mi alma!
P: ¿El viraje de Podemos con el asunto catalán favoreció a alguien?
R: Sí. ERC y CUP siguen hablando de independencia, pero Homs (CDC-DiL) cambia de discurso y propone una comisión parlamentaria para el referéndum en Cataluña, iniciando un camino de política real. La declaración unilateral de independencia no era política real, sino de máximos, palabrería. Pero cuando Podemos abandona el referéndum, Homs sabe que llegó su momento. Para mí, CDC han sido los más inteligentes de todos. ¿No quieres hablar nada conmigo? Bueno, pues te voy a llevar al lugar donde cada vez que te expreses te vas a destruir. Y ahí ha llevado Homs a ese PP-Cat de la España de los castillos y ahí lo ha destruido. Ahora Homs viene a negociar. Ahora que el proceso que lleva a alguna clase de referéndum ya parece imparable, vienen hechos unos toros.
P. Luego hablaremos más de Cataluña, pero antes quiero plantearle una crítica. Usted sostiene que la generación nacida desde el 73 es más avanzada que la del 'baby boom' y la de los niños de la guerra y la autarquía, pero yo no estoy seguro: las generaciones de la Transición me parecen partidarias del consenso; la mía, en cambio, más proclive al frentismo. En este sentido, Podemos y Ciudadanos se han enfrentado ideológicamente a la manera de mi generación, en la que el consenso está mal visto, en la que hay que etiquetarse. ¿Está replanteándose su valoración de la generación joven tras la campaña frentista para el 26J?
R. No, no en sus grandes números. Yo pienso en un ciudadano joven (o nuevo) del primer mundo, cuyo ámbito de expresión es la UE. No España, sino la UE. Es un ciudadano que comparte una serie de valores, una ética, unos principios donde todo se resuelve por negociación, por acuerdo entre las partes. Eso es el Primer Mundo. En el Primer Mundo, las actitudes españolas no caben.
P: Con actitudes españolas, ¿se refiere usted a acatar el “ordeno y mando”?
R: Sí, el caudillismo, el “porque me da la gana”, el “que me lo diga un juez”. Eso no cabe en el Primer Mundo. Ciudadanos, al principio, quiere ocupar un lugar donde no hay nada, solamente expectativa: el espacio liberal-conservador del siglo XXI y de la Unión Europea. Pero ahora Rivera empieza a hablar de que se rompe España y de los que quieren romper España. Y luego, progresivamente, identifica al PSOE como el partido con quien tiene que hacer el futuro. Eso aleja a Ciudadanos del espacio liberal-conservador europeo y lo lleva al centro político. El centro político es la ausencia de cultura política. Es la UCD. Tú dices que éramos gente de consenso, pues no: éramos gente temerosa, y el electorado de UCD era aquel votante que decía: “Yo no soy de izquierdas ni de derechas”. Funcionaba muy bien en términos de mercado, pero lo que había era temor.
"El centro político es la ausencia de cultura política. Es la UCD. Tú dices que éramos gente de consenso, pues no: éramos gente temerosa"