Buenos días, muchas gracias por las felicitaciones!
Vamos allá. Comenzaré tuteándoos

Soy funcionaria. He sacado ya dos oposiciones (con plaza), cada una me costó cinco años de estudio, no porque los requiriese el puesto para el que me estaba preparando, sino porque estaban publicadas pero la convocatoria se retrasó años.
Y esto es como el carnet de conducir, una vez que empiezas hay que seguir; si no, es tiempo, dinero y esfuerzo tirado.
Hace nada y menos he terminado la promoción interna del puesto en el que estoy actualmente, año y medio de preparación. Aún no sabemos ni los resultados del segundo examen (tercero, ya que lo anularon y nos lo han hecho repetir). Por eso decía que estoy curada de espanto.
¿Derecho? Pues se juntan varios motivos.
El primero, dar ejemplo a mi hijo. De nada vale decirle a nadie que la verdura es buena si luego no te ve probarla.
Después también está el reto personal.
Cuando de joven pude estudiar, no quise, preferí trabajar. La inmadurez de la adolescencia yo la tuve elevada al cubo.
Desde entonces no he perdido el tiempo, ha sido una lucha continua que casi siempre se ha traducido en resultados positivos, pero ahí se quedó esa espinita. Vamos a ver si nos la sacamos.
Y será derecho porque me apasionan las pelis en las que veo a los abogados trabajar. Esas argumentaciones, esa rapidez mental para hacer la pregunta adecuada en el momento adecuado... Igual son solo películas, pero a mí me fascinan. Nunca he tenido una vocación definida por nada, pero puestos a escoger... mejor hacer algo que me guste mucho.
No sé si algún día me dedicaré a ello. En principio no está previsto, pero yo nunca cierro puertas a nada por anticipado. Nunca se sabe...
Un saludo.