¿De qué manera el sistema de justicia actual perpetúa la desigualdad social y marginaliza a ciertos grupos de la sociedad? ¿Qué medidas podrían implementarse para garantizar una justicia más equitativa y accesible para todos?
La respuesta es bien sencilla: de ninguna manera.
La Justicia es igual para todos, deriva del principio de igualdad ante la Ley del art. 14 CE y las leyes procesales han desarrollado ese principio para garantizar a todos los ciudadanos el acceso a los recursos básicos para litigar. Claro, que desde un punto de vista comunista se ve al Derecho como un instrumento para perpetuar a la clase dominante en el poder. Por ello instan a su cambio de forma más o menos violenta para sustituir el ordenamiento jurídico por otro acorde a sus ideas. Eso ya lo vimos en Filosofía del Derecho, nada nuevo bajo el sol.