Hablo por mí aquí:
Lo que llaman matrimonio homosexual no es tal matrimonio. Lo que ocurre es que el ordenamiento español es muy aficionado a las ficciones, y en este caso, como en otros, busca arrimar un término ya consolidado a una nueva situación para intentar dotarla de legitimidad.
La legislación española suele soltar cosas como: "a todos los efectos", "sin distinción...", etc. Pero eso sólo afecta a los aspectos legales. Nunca podrá cambiar la realidad.
De la misma forma que se solicita que las parejas de hecho disfruten de las mismas ventajas legales que los matrimonios (obviaré el adjetivo "tradicional" porque para mí matrimonios sólo hay unos), cualquiera podría solicitar que cuando pilla un rollete de de esos de un par de semanas, le den un permiso en el trabajo, un aumento de sueldo ese mes para poder agasajar como debe ser a la contraria, etc. A fin de cuentas ¿no se trata también de una relación afectiva? ¿por qué se va a discriminar a esta gente. ¿Son relaciones esporádicas? Pues como todas en la actualidad. Así que venga... de acuerdo en dotar a todos de los mismos derechos cuando se inicia una relación de pareja, sea esta del signo que sea, pero para todos. O mira, mejor: para ninguno, y así no hay tal discriminación.