Creo que discrepar no es humillar.
Unos y otros podemos pensar de forma diferente, por supuesto,y expresarnos de distintas formas, claro.
Decir que no estamos de acuerdo y explicar porque no estamos de acuerdo, argumentar, seguramente nadie convencerá a nadie porque ya somos muy mayorcitos. Pero podemos pasar un buen rato, discutiendo.
Entre no opinar igual, u opinar lo contrario y expresarlo y entre utilizar las expresiones para humillar al que no piensa como nosotros existe una diferencia, es la tolerancia.
Vengo observando, que para cualquier tema, aparece de forma reiterativa la Iglesia. Es como una obsesión. Por supuesto que se puede estar en contra de la Iglesia, pero no creo que por ello haya que humillar constantemente a un miembro de ella, sobre todo cuando nunca ha faltado el respeto a nadie.Lo que no impide que no piense igual.
Insisto las libertades hay que defenderlas cada día, en cada momento y entre las libertades está la libertad religiosa, soy agnóstica y me gusta que respeten mi elección, creo que el mismo respeto se merece cualquier persona que sea católica, por poner el ejemplo que más cerca nos cae.