Es cierto que hay algunos programas muy extensos, como el de Procesal I, pero son los menos. En cualquier caso, como muchas veces incorporan al programa otros datos (horario de atención, teléfono y fax del departamento, epígrafes excluidos, etc.) que no necesitamos imprimir, yo siempre los paso a Word y voy eliminando espacios entre líneas, información que no necesito, disminuyo la letra, etc. Al final consigo un programa más comprimido y manejable.
Es curioso eso que cuentas SIMPLICISSIMUS, la chica se debía aburrir mucho la pobrecita. Deberías haberle alegado que "quien puede lo más, puede lo menos". Sin saber eso, no se sale de casa.

Yo nunca he tenido problemas por cambiar el formato del programa y comprimirlo. Lo que sí me molesta es que te interrumpan para revisarlo. En Procesal I mientras hacía el examen, estaba mirando el programa muy absorta, y en esas se acercó una señora del tribunal y me quitó el programa de las manos, sin pedírmelo, al tiempo que preguntaba: "¿Puedes utilizar el programa?". Como estaba tan concentrada, me asustó, me cabreó, y mi reacción inmediata fue quitárselo a ella de un tirón mientras le decía: "¡Pues claro!", con cara de pocos amigos. La dejé tiesa, ya no me dijo ni media.
Al entregar el examen le dije que disculpara mi reacción, pero es que estaba muy concentrada y me había interrumpido. La verdad que ni lo pensé. Ellos pueden mirar, sin desconcentrarte, el examen que estás haciendo, y deben saber si en ese examen permiten utilizar programa o no. No es necesario interrumpirte y menos de esa forma tan brusca.
Pero vamos, en general, ni me miran el programa siquiera. Y lo cierto es que en la mayoría de los exámenes, ni siquiera lo miro yo tampoco.

Un saludo.