Celeridad vs eficacia, rigor, independencia y profesionalidad.
El dilema de un catedrático y también, el de un juez.
Creo que es mejor las cosas en su momento y a su debido tiempo. Lamentablemente la presión se enfoca en que sean rápidos, supersónicos: ¡no en que sean buenos profesionales!
Puede que alguno me diga que una cosa no está reñida con la otra, pero el poner demasiado enfoque en que sean rápidos, también supone en cierto modo poner demasiado poco enfoque en que sean buenos profesionales, eficaces e independientes. ¡Pienso en los catedráticos, pero sobre todo en los jueces!