Les dieron una brutal paliza a cuatro que se negaron a secundar la huelga, tras haber dicho lo de "entrar a matar".
Si no los mataron, fue porque los médicos salvaron esas cuatro vidas.
En todo caso, es obvio: su condición de enemigo de Intereconomía y de amigo de otros medios, hace de este expediente una burla. Pues convierte la separación típicamente política amigo-enemigo, en fuente del Derecho. Y de hecho es la principal fuente del Derecho Administrativo Sancionador y es lo que invalida de raíz toda resolución basada en él o toda norma administrativa sancionadora. En rigor, es la negación de la separación de poderes y por ende, del derecho y de la democracia.
Y es lo mismo que invalida, naturalmente, toda sentencia del TC y toda jurisprudencia, puesto que están basadas en la distinción amigo-enemigo y no en los hechos y el derecho, y es necesariamente así, puesto que todo nombramiento se basa en la distinción amigo-enemigo, no en los méritos.
Y es lo mismo que invalida toda educación pública, pues está basada en un plan educativo que dice de los amigos todo lo bueno y de los enemigos, todo lo malo, convirtiéndolo en un canal de propaganda. Y se invalida igualmente, por el hecho de convertir a los niños hispanohablantes en enemigos y a los hablantes de lenguas regionales, en amigos. Y todo el edificio, termina de invalidarse, en fin, cuando al permitir y tener manga ancha con los niños gamberros, de hecho se trata al estudioso y civilizado como enemigo y al gamberro como amigo.
Éste y no otro, es el concepto que tienen las Autoridades de lo Público: con los amigos, contra los enemigos. Y la argucia constitucional para permitir todo eso, fue autorizarlo, suponiendo que lo iban a gestionar de modo Institucional, imparcial, neutral y objetivo, cuando sabían perfectamente que no iba a ser así, pero había que decir todo lo contrario para que colara y se votara sí en el referéndum. Conseguido esto, se consagraron de modo permanente al golpe de Estado de desmontar desde dentro la democracia y desvirtuar hasta convertir en papel mojado, los derechos fundamentales. De modo que el único artículo vigente de la Constitución es el artículo 0, el de prometer hasta meter, de los cuales el 124 y el 159 no son sino meras adaptaciones del 0, consistente en prometer hasta meter.