Pues a mi me corrigió otra profesora -Mª Isabel Martín de LLano- y tengo la misma apreciación: Mucha cicatería. Hice un examen bastante bueno y, sin embargo, tengo un 8,5. Al final opté por no reclamar, porque es más fácil justificar una decisión de este tipo en un examen de preguntas de desarrollo, como es el caso de esta asignatura, que en uno de tests, en el que todo es objetivo. De todas formas mi experiencia en reclamaciones es que todas prosperan. Al menos, en mi caso.