Lo que tantas veces he dicho, queda aquí sobradamente demostrado: para los socialistas, los musulmanes son los suyos. Y si los suyos lo que proponen es el convertirse o morir, es normal que les parezca bien. Es normal, porque el modelo que tenían antes de convertirse al islam, tras caer el Muro de Berlín, era otra repugnante dictadura que era el GULAG, que no era muy diferente al "convertirse o morir" del Islam, porque el Islam no es otra cosa: es eso.
Y la actitud de los socialistas no es otra cosa que colaboracionismo con el terrorismo islámico, etarra, socialista o el que venga. No es muy diferente a la Francia de Vichy.
Los japoneses pagaron por sus atroces crímenes con la guerra y la destrucción: lo mismo puede decirse del PSOE de Largo Caballero y Negrín: no son casos similares al de esta mujer, que por querer ser libre, ha sido condenada a muerte. Por querer tener la libertad que tienen aquellos que dicen: "que se convierta y se joda." Aquí también hay musulmanes, que igualmente quieren imponer el convertirse o morir y esta gente, cerrando filas con el terrorismo islámico, porque el PSOE lo apoya. Gente como esta, es la que facilita la imposición de dictaduras atroces como el "convertirse o morir" del islam. Cierto que ellos ya se han convertido al Islam, pero hay otros que en modo alguno estamos dispuestos y que por eso, nos solidarizamos con esta mujer.