Saludos cordiales.
Bueno he tardado en contestar por los exámenes pero la semana que viene te prometo que seguiremos con el tema ya que a mí particularmente me apasiona la historia, pero no he podido resistir contestar un poco....
He leído con atención tu escrito y tras quitar la paja ideológica o de insinuaciones más o menos despreciativas señalarte en primer lugar que el mero hecho de entrar en discusión histórica sobre unos determinados hechos no le convierten a alguien en fascista o justificador de golpes de Estados o franquista, de eso ya la izquierda sabe mucho sobre justificar sus crímenes, no, no se trata de eso, se trata de tras la polvareda y maraña de datos del cortar y pegar de páginas de internet el analizar los datos y cotejarlos con otras fuentes históricas.
El hilo de internet que refieres al final como fuente bibliográfica de su exposición “letraslibres” refleja un artículo del historiador británico hispanista Paul Preston. Bueno, perdón por lo de historiador ya que es el típico personaje sectario y que directamente confabula mentiras históricas y cambia versiones y datos para seguir apoyando su tesitura histórica.
La verdad es que la profesión de historiador es de las pocas donde habitualmente las mentiras no tienen consecuencia alguna y un buen ejemplo de ello es el hispanista aludido, manipulaciones, datos inequívocos que se le dan la vuelta para seguir argumentando un levantamiento del general Franco contra unos demócratas que luchaban por los derechos de todos los españoles.
Como ejemplo señalarte que dicho historiador en su último libro hace referencia a sobornos de W. Churchill sobre generales franquistas al objeto de que España no entrase en la segunda guerra mundial a favor de Alemania, y como única referencia hace mención a un historiador – biógrafo de W. Churchill que con el empeño de ridiculizar al mandatario británico comenta tales sobornos sin adoptar ningún documento o prueba alguna. Esa es la forma de trabajar de Preston y compañía, ideología pura al servicio de lo políticamente correcto. Por cierto familiares de los generales mentados han preparado una demanda judicial contra dicho historiador y habrá que ver cómo acaba el tema.
El sr. Preston por si fuera poco y ante la imposibilidad de rebatir a historiadores que poco a poco se van abriendo hueco entre las mentiras ideológicas de los últimos años vertidas sobre la guerra civil española llega incluso a pedir que se silencie mediante censura a dichos historiadores, ¿miedo?.
Tengo que darte la enhorabuena ya que acabas de dar unos datos sobre las elecciones de 1936 que no existen oficialmente sus actas, el único historiador que en la década de los 70 reflejó datos fue Javier Tusell en su libro – “las elecciones del Frente Popular “ – 1971, que fueron corregidas por el estudio de D. Ramón Salas Larrazábal – “Los datos exactos de la guerra civil “ – Madrid – 1980.
Las elecciones generales de 1936 no sólo concluyeron con resultados parejos para ambos bloques sino que además estuvieron influenciadas por las violencias y el fraude en el recuento de los sufragios. Así sobre un total de 9.716.705 votos emitidios, 4.430.322 fueron para el Frente Popular; 4.511.031 para las derechas y 682.825 para el centro. Otros 91.641 votos fueron emitidos en blanco o a candidatos marginales.
Los datos son sacados de los dos estudios anteriormente repetidos, ya que te repito que las actas nunca fueron publicadas oficialmente y ambos autores hicieron regresiones lineales estadísticas y extrapolaciones de población total y los resultados de las anteriores elecciones, pero son eso estimaciones que lógicamente no variarían mucho de las elecciones anteriores.
Sacas a colación interesantes analogías entre los hechos de la década de los años 30 con hechos actuales como las elecciones generales de 2004 donde el atentado terrorista islámico o de quien haya sido finalmente marcó el resultado final. Pues sí, parece más que lógico con los datos que había de encuestas previas a las elecciones que las iba a ganar el PP y que dicho atentado marcó el resultado posterior y una victoria general del PSOE que ni ellos se lo esperaban.
Lo que sí es coincidente fueron las violencias y actos antidemocráticos contra sedes del PP y afiliados que sufrieron agresiones físicas y verbales por grupos dirigidos por el PSOE y sus arietes informativos en un periodo de reflexión que en otros países hubiera tenido como consecuencia normal el aplazamiento de las elecciones o medidas policiales e imputaciones jurídicas. Yo no justifico nada, y creo que la victoria electoral del PSOE fue legal y sin paliativos ya que el atentado entiendo que influyó pero como buen demócrata hay que aceptar el voto de la soberanía popular, nos guste o no. Otros también podrían aplicarse el cuento y cuanto menos tener la mente abierta a la crítica histórica.
Podrás decir que el supuesto fraude de las elecciones generales de 1936 es una excusa derechista para deslegitimar al frente popular pero te copio literalmente unas declaraciones en el Journal de Geneve del Presidente de la república D. Niceto Alcalá Zamora donde el mismo reconocía los fraudes e irregularidades:
“A pesar de los refuerzos sindicalistas, el Frente Popular obtenía solamente un poco más, muy poco, de 200 actas, en un parlamento de 473 diputados. Resultó la minoría más importante pero la mayoría absoluta se le escapaba. Sin embargo, logró conquistarla consumiendo dos etapas a toda velocidad, violando todos los escrúpulos de legalidad y de conciencia.
Primera etapa: Desde el 17 de febrero, incluso desde la noche del 16, el Frente Popular sin esperar el fin del recuento del escrutinio y la proclamación de los resultados, la que debería haber tenido lugar ante las Juntas Provinciales del Censo en el jueves 20, desencadenó en la calla la ofensiva del desorden, reclamó el Poder por medio de la violencia. Crisis: algunos Gobernadores civiles dimitieron. A instigación de dirigentes irresponsables, la muchedumbre se apoderó de los documentos electorales: en muchas localidades los resultados pudieron ser falsificados.
Segunda etapa: Conquistada la mayoría de este modo, fue fácilmente hacerla aplastante. Reforzada con una extraña alianza con los reaccionarios vascos, el “Frente Popular” eligió la Comisión de validez de las actas parlamentarias, la que procedió de una manera arbitraria. Se anularon todas las actas de ciertas provincias donde la oposición resultó victoriosa; se proclamaron diputados a candidatos amigos vencidos. Se expulsaron de las Cortes a varios diputados de las minorías. No se trataba solamente de una ciega pasión sectaria: hacer en la Cámara una convención, aplastar a la oposición y sujetar el grupo menos exaltado del “Frente Popular”. Desde el momento en que la mayoría de izquierdas pudiera prescindir de él, este grupo no era sino el juguete de las peores locuras.
Fue así que las Cortes prepararon dos golpes de estado parlamentarios. Con el primero, se declararon a sí mismas indisolubles durante la duración del mandato presidencial. Con el segundo, me revocaron. “.
A partir de ahí todo fue posible, la anarquía, la quema de conventos indiscriminada, armar a milicias afectas a las izquierdas, atentar contra todo el que fuera considerado gente de derechas y el camino a la guerra civil estaba servido.
No pretendo convencerle a usted, D. Joaquín, sino simplemente el rebatir una versión histórica de los hechos que condujeron a la guerra civil que en mi opinión son absolutamente deformados y mitificados para hacerlos encajar en la actual ideología demócrata de las izquierdas. Lo fácil y rápidamente comestible es la versión de que un grupo de generales en representación de unas oligarquías feroces, ambiciosas, una patronal radical que vulneraba sistemáticamente los derechos de los trabajadores, apoyados por un clero radical y retrógrado, todos ellos se alzaron contra un grupo de partidos y agrupaciones políticas representadas por el Frente Popular y que buscaban consolidar una democracia parlamentaria con derechos políticos para todos y el desarrollo y modernización de España. Es una versión muy bonita y preciosa, y en palabras de un amigo mío historiador de carrera y profesor de universidad, es la única versión para dar clases en la universidad y prosperar en ella y no tener problemas.
Puede ser una versión perfectamente asimilable en lo que nos gustaría que hubiera sido, pero es una tergiversación histórica y una total mentira de lo que ocurrió. ¿Cómo es posible que la mitad más o menos de la población apoyara el levantamiento de Franco, si la sensación era de opresión por unas oligarquías totalitarias?. ¿Cómo es posible que la mitad del ejército se posicionara uno en cada bando?.
El negar hoy en día la polarización y la división total de la sociedad española en esos años es no querer enterarse de nada y de la verdad, en palabras de Gil Robles “media España se negaba a morir” y muchos españoles de ambos bandos vieron en la guerra civil la culminación de el fracaso de tanto de las izquierdas como de las derechas y el suceso inevitable que los odios y radicalismos tanto de unos como de otros culminaron en la guerra civil.
No se trata de buscar un único responsable – que para mí fueron las izquierdas radicales – sino el conocer nuestra historia con la mayor cantidad de datos históricos reales y no manipulados, y tras dicho conocimiento tener la seguridad de que algo así no se vuelva a repetir pase lo que pase.
En esa época no había muchos demócratas de corazón que respetaran las opiniones contrarias y sí fanáticos que intentaron imponer un estilo de vida, un fanatismo que fue la regla general de toda Europa y no únicamente en España.
Para saber a quién se le puede achacar la mayor parte de la responsabilidad por los hechos hay que hacer un análisis histórico ex-ante, esto es, no podemos analizar los hechos pasados con parámetros actuales. La guerra civil española estalló en un ambiente europeo de continua amenaza revolucionaria comunista por una parte y anarquista por otra. Tras la revolución Rusa los intentos revolucionarios en diversas partes de Europa se hicieron habituales y fueron campañas organizadas y agitadas por la Komitern, y lógicamente a dichas amenazas hubieron campañas de signo contrario y se organizaron grupos anti-comunistas, el fascismo surgió como oposición al comunismo y el ambiente que había en Europa en esos años era irrespirable.
Dichos movimientos anti-comunistas se vieron culminados en la Alemania nazi de Hitler, que ante la pasividad de las democracia europeas se alzó el poder en 1933 y alzando la bandera de la humillación del pacto de Versalles y con una política nacionalista logró éxitos políticos y militares inimaginables.
Había una crisis de valores, del liberalismo democrático que había tenido su mayor apogeo antes de la primera guerra mundial y junto con la crisis de las instituciones internacionales como la Sociedad de Naciones que no supieron imponerse ni moral ni legalmente ante las naciones que utilizaban la fuerza para imponer unas políticas de hechos consumados, dígase Alemania, Italia, la URSS, etc.
Y por supuesto el crack económico en USA de 1929 con su posterior influencia en Europa no ayudó a calmar los radicalismos.
Otra versión bastante habitual en la historiografía izquierdista es atribuir a la guerra española el ser el primer episodio de la Segunda Guerra Mundial y encuadrarla como una lucha de las democracias contra el fascismo pujante de Alemania e Italia, asimilando sin ningún pudor a la URSS de Stalin el carácter de democrático. Dicha versión olvida el pequeño detalle de que la segunda guerra mundial entre sus factores desencadenantes tuvo uno muy importante como fue el pacto de connivencia del nazismo con el comunismo en 1939 con el pacto germano – ruso ( Pacto Ribbentrop – Molotov).
¿Cómo es posible que la demócrata URSS que luchaba contra el fascismo español en 1936, en pocos más de dos años se alió con el mayor representante del fascismo europeo, esto es, la Alemania nazi?. La verdad que el impacto que debieron tener algunos afiliados al PCE de buen corazón tuvo que ser tremendo y dicho pacto terminó de desprestigiar al PCE en España.
En tu segunda parte del texto, tras los datos electorales, haces unas series de preguntas y expones a modo de telegrama fechas y hechos, es imposible contestarlas una a una porque si no habría que escribir un libro, pero haré a modo de resumen una contestación general.
La extrema izquierda española surgió en 1821, cuando los “exaltados” de ideología jacobinista y radical lograron desplazar a los “doceañistas” liberales y buena parte de nuestro siglo discurrió entre levantamientos de unos y respuestas de otros, con sus correspondientes constituciones.
Desde finales del s. XIX las izquierdas y los nacionalismos habían hecho acto de presencia como fuerzas de escaso arraigo popular pero que llegaron a tener un fuerte papel en la aniquilación de la monarquía parlamentaria que había durante el periodo de tiempo llamado Restauración y la instauración de la segunda república.
La Restauración ha sido el segundo periodo de nuestra historia moderna con mayor crecimiento económico, se instauró una monarquía constitucional en la que se fueron consolidando derechos políticos como los de asociación, que permitió la fundación de sindicatos o el sufragio universal. España era un país atrasado económicamente respecto a potencias como Gran Bretaña, Francia o Alemania pero no respeto a Italia y otros países mediterráneos y de la Europa central y oriental. España caminaba a pasos agigantados hacia una modernización y un progreso económico, el problema vino de los radicalismos y fanatismos.
Las izquierdas en dicha época estaban muy fragmentadas limitándose en importancia los republicanos, los anarquistas y los socialistas. La desastrosa experiencia de la primera república explica el porqué el republicanismo quedó relegado a grupos muy reducidos de las clases medias influenciados por no pocos movimientos masones y por ello de un fuerte componente anticlerical.
Es precisamente dicho escaso arraigo popular lo que convenció definitivamente a los republicanos que sus posibilidades de éxito iban acompañadas de erosionar el sistema y de desestabilizarlo y si para ello había que usar la violencia se usaba y punto, la democratización del sistema hubiera perjudicado sus objetivos ya que la estabilidad y democracia de la monarquía parlamentaria les hubiera restado credibilidad y legitimidad ante el pueblo, y a dicha tarea se dedicaron.
Los anarquistas que derivaban su ideología del sector de la Internacional obrera seguidora de Bakunin con preferencia sobre Marx, eran partidarios de la acción directa acompañada de atentados terroristas convencidos de que la muerte del monarca o políticos importantes del sistema no sólo era legítima sino práctica. El movimiento anarquista arraigó sobre todo en el campo andaluz y en la industria catalana y hasta bien entrado el s. XX fue la fuerza obrerista más importante.
Sin embargo la fuerza más importante obrerista fue el PSOE y la UGT, su sindicato. El PSOE era convencidamente marxista y estaba entregado desde su fundación por Pablo Iglesias a la causa revolucionaria, esto es, a la instauración de la dictadura del proletariado. Su fundador Pablo Iglesias estaba muy influenciado por el socialismo francés de Guesde con quién mantenía correspondencia habitualmente. Guesde representaba un marxismo práctico más que teórico que veía la existencia de un partido socialista como el elemento esencial para erosionar los regimenes constitucionales valiéndose precisamente de las libertades para hacer propaganda de sus ideas y finalmente encabezar una revolución en forma de dictadura proletariada.
El PSOE fue fundado el 2 de mayo de 1879 en una posada de la calle Tetuán de Madrid, donde se eligió a una comisión que redactara su programa fundacional y se hablaba claramente de palabras como “destruir” la sociedad actual hasta llegar a una colectivista con propiedad estatal de los medios de producción y el señalamiento, como objetivos que debían ser abatidos de sectores enteros como los empresarios, militares, partidos denominados burgueses o el clero.
Esto es un punto básico y conviene recordarlo ya que desde sus inicios el PSOE adoptó la postura de la Internacional Comunista y sólo hace falta ver lo que pasó en la revolución rusa con los posteriores millones de muertos para extrapolar fácilmente lo que hubiera pasado en España.
El PSOE fue un partido insignificante y se dio cuenta de que si quería aspirar a entrar en las instituciones legales debía asociarse con los republicanos, y así en las elecciones legislativas de 1910 la creación de una candidatura conjunta con los republicanos permitió a Pablo Iglesias convertirse en el primer diputado de la historia del socialismo español.
Conviene señalar algunos de sus primeros discursos en las Cortes:
Refiriéndose a la acción de los socialistas afirmó que: “Estarán en la legitimidad mientras la legalidad le permita adquirir lo que necesita; fuera de la legalidad.... cuando ella no les permita realizar sus aspiraciones. “
“Tal ha sido la indignación producida por la política del gobierno presidido por el Sr. Maura que los elementos proletarios, nosotros de quien se dice que no estimamos los intereses de nuestro país, amándolo de veras, sintiendo las desdichas de todos, hemos llegado al extremo de considerar que antes que su Señoría suba al poder debemos llegar al atentado personal”.
El PSOE y la UGT siguieron una política encaminada al aniquilamiento del sistema legal mediante un acoso continuo, y su primera intentona importante fue la revolución de 1917. El origen de la revolución de 1917 puede remontarse al acuerdo de acción conjunta que la UGT socialista y la CNT anarquista habían pactado en 1916, y ambas organizaciones pactaron un plan para ir a la huelga general, hubo muertos y la posterior represión fue tan blanda que los fracasados republicanos, anarquistas, socialistas, nacionalistas y socialistas vieron debilidad y percibieron un sistema débil de aniquilar.
Para no alargar mucho el debate me sitúo inmediatamente después de las elecciones municipales de 1931. Durante muchos años la propaganda pro-republicana ha vendido dichas elecciones como si fueran un plebiscito popular en pro de la República y los resultados en concejales monárquicos fueron demoledores a los republicanos, si bien, en las principales capitales de provincia ganaron los republicanos. En global los republicanos obtuvieron 5775 concejales frente a los 22150 monárquicos.
Durante la noche del 12 al 13, el general Sanjurjo jefe de la Guardia Civil dejó claro en un telegrama que no contendría un levantamiento contra la corona por las armas, el conocimiento de dicha debilidad puede explicar como los monárquicos ofrecieran al comité revolucionario unas elecciones a Cortes que éstas rechazaron ya que olieron sangre y debilidad y exigieron la marcha del rey amenazándolo de muerte a él y a su familia. Sea como sea, y hayan habido intrigas monárquicas en connivencia con republicanos, que si masones, o demás, lo cierto es que la propia monarquía renunció a su legalidad y abdicó ante los republicanos.
Hay constitucionalistas e historiadores que por la forma de advenimiento de la República ya consideran la misma viciada de origen, yo te reitero que pienso que sí tienen legitimidad de inicio ya que fue la propia monarquía quien abdicó de su responsabilidad, motivado por el miedo a una guerra civil. La llegada de la república fue acogida por una ola de entusiasmo de una parte de la población y de buena parte de la intelectualidad. Los republicanos se sentían envalentonados e hiperlegitimados para tomar decisiones que estuvieron por encima de su resultado electoral, y no dudaron en usar el apoyo de la calle cuando el sufragio les fuera negativo.
El primer bienio republicano estuvo marcado por la alianza entre republicanos y el PSOE y por un increíble sectarismo ideológico, de incompetencia económica y la acción no parlamentaria acompañado de coacciones y violencias físicas de las izquierdas hacia lo que ellos entendían que eran símbolos de la derecha o del sistema anterior monárquico. Pero sobre todo por la no aplicación de la ley que todo gobernante debe tener como primera obligación en los casos de quemas de no sólo conventos o iglesias sino de bibliotecas y museos patrimonio histórico nacional con pérdidas de valor incalculable.
Durante dicho periodo el tema religioso se convirtió en fundamental para el gobierno en contra de medidas como la reforma agraria. No se trató de separa Iglesia – Estado como en otros países sino siguiendo el modelo jacobinista francés de acabar y exterminar la influencia católica sustituyéndola por otra laicista. Los comunistas, socialistas y anarquistas veían en la Iglesia un rival social que debía ser vencido sin concesión alguna.
La Constitución republicana de 1931 adoptó una política anti-clerical sin tener en cuenta los sentimientos de buena parte de la población española y en un sistema democrático lo lógico hubiera sido separar Iglesia del Estado pero dejar la libertad a cada uno de elegir la educación religiosa o no para sus hijos. No, la república prohibió que la Iglesia Católica ejerciera función alguna educativa y procedió a la disolución de la Compañía de Jesús.
La Constitución de 1931 se fue aplicando a rodillo y en contra de buena parte de la mayoría de la población española sin intentar acoger a todos los españoles sea cuales fuera su ideología y en contra de un sentimiento religioso que era mayoritario y de enorme arraigo popular.
El propio presidente de la República, Alcalá Zamora señaló: “La Constitución se dictó, efectivamente, o se planeó sin mirar esa realidad nacional... se procuró legislar obedeciendo teorías, sentimientos e intereses de partido, sin pensar en esa realidad de conveniencia patria, sin cuidarse apenas de que se legislaba para España”. Curioso paralelismo con actuales leyes como la de la Memoría histórica.
“... una Constitución que invitaba a la guerra civil... “.
El sectarismo de las izquierdas fue funesto para los intentos de reforma del gobierno republicano – socialista, sólo a ellos y no a las derechas es atribuible su fracaso histórico en esos dos primeros años en los que por su demagogia e intento de eliminar tanto política como socialmente a su rival ideológico, en vez de articular un sistema democrático con respeto de los derechos de todos.
Otro de los fracasos sonoros fue la reforma militar que simplemente quedó en primar jubilaciones anticipadas de oficiales y generales, y se vio sustituida la carrera militar técnica y basada en criterios profesionales por una política sectaria en lo que lo más importante es la adhesión al poder republicano.
Ya hemos mencionado la reforma educativa que al prohibir que las congregaciones religiosas pudieran seguir ofertando su enseñanza se perjudicó a más de 60.000 niños que de golpe se vieron sin colegios ya que el Estado no pudo sustituir dicha oferta educativa, y lógicamente dicha medida afectó principalmente a las familias más pobres ya que las acaudaladas podían pagar una educación a sus hijos.
Esgrimes como fracaso de la derecha la reforma agraria, otra vez los hechos desmienten tu versión. Las izquierdas en el poder en el prime bienio no es que no hicieran nada parecido a una reforma agraria sino es que agudizaron las tensiones sociales con leyes como la ley de términos que en principio debían favorecer al trabajador del campo pero que en realidad provocaron una contracción del empleo y arrojaron un peso tremendo sobre pequeños empresarios y medianos. No se hizo un análisis lógico de la situación del campo y acabó beneficiándose – sin quererlo – al gran propietario, además se añadió el factor de las violencias y ocupaciones de tierra sin legalidad alguna como el caso de los anarquistas y el gobierno no supo atajar el problema de orden público que se le presentó y acabó por admitir de hecho ocupaciones ilegales.
Por cierto el episodio de Casas Viejas ocurrió en enero de 1933 en periodo de gobierno de izquierdas y fue el descrédito final de Azaña, ya que según versiones de la época ordenó a la fuerza de asalto policial el fusilamiento indiscriminado y sin procedimiento alguno de los anarquistas sublevados y detenidos.
En definitiva la República se estrenó con un gobierno incapaz de dominar la situación, enfrentó a todo el mundo con su política legislativa y fue incapaz de que las izquierdas radicales lo hicieran aún más como el caso del PSOE que sufría un proceso de bolchevización y le costó a Julián Besteiro su eliminación política y el triunfo del Lennin español, Largo Caballero, que propugnaba directamente la revolución violenta que destruyera la república e instaurara una dictadura del proletariado.
El 19 de noviembre de 1933 hubo de nuevo elecciones generales, con una participación del 67.46 % censo electoral y con el voto por primera vez de las mujeres ( por cierto es interesante leer los debates en las Cortes sobre el voto de las mujeres donde las diputadas de la izquierda estaban en contra de dicho derecho y fue defendido por la derecha). Las derechas obtuvieron 3.365.700 votos, el centro 2.051.500 votos y las izquierdas 3.118.000 votos.
En puridad democrática la fuerza mayoritaria la CEDA tuvo que haber sido la encargada de formar gobierno, pero las izquierdas que se consideraban las poseedoras de la república no iban a consentirlo y comenzaron las maniobras y amenazas veladas y directas hacia la guerra civil y de forma arbitraria el presidente de la República Alcalá Zamora le encargó la formación del gobierno al centro de Lerroux. Otra anomalía más de esa república tan tolerante y democrática, el PSOE sin embargo esa ilegalidad que apartaba a las derechas del poder legítimamente logrado en las urnas le pareció poco y con los nacionalistas empezaron a organizar un levantamiento armado, un golpe de estado para acabar con la legalidad de centro – derecha.
Estamos sin duda ante el hecho más grave de la República, por primera vez tras el golpe de Sanjurjo que fue completamente minoritario e intervinieron una decena de ex monárquicos, ahora las izquierdas que estaban en el parlamento que eran parte del sistema intentaron anular el propio sistema con una insurrección armada y no era comparable a las revueltas anarquistas que eran fuerzas fuera del parlamento y anti-sistema per se.
Las declaraciones y las llamadas a la revolución eran normales y corrientes, en enero de 1934, Indalecio Prieto publicaba unas declaraciones en la prensa del PSOE: “Y ahora piden concordia. Es decir, una tregua en la pelea, una aproximación de los partidos, un cese de hostilidades... ¿Concordia?. No. ¡ Guerra de Clases! Odio a muerte a la burguesía criminal. “
El 30 de agosto Azaña efectuaba unas declaraciones en las que nadie podía engañarse de sus intenciones: “Estaríamos de toda fidelidad... habríamos de conquistar a pecho descubierto las garantías”; las izquierdas se opondrían con las armas si la CEDA insistía en su legítimo derecho de formar gobierno.
El parlamento y la democracia sólo resultaba legítimo si iba dirigido hacia las izquierdas y controlado por ellas, cuando la voluntad popular marcó otra cosa acudieron a su verdadera naturaleza, esto es, a la insurrección armada.
Comentas el caso de corrupción del estraperlo, que comparado con el caso Turquesa es una minucia. La Guardia Civil en septiembre de 1934 descubrió un importante alijo de armas en el barco Turquesa en las rías asturianas, la entrega fue ordenada por Indalecio Prieto y transportada en camiones hasta las Diputaciones provinciales controladas por el PSOE con la finalidad de armar a los socialistas ante la inminencia del golpe de 1934 en Asturias y Barcelona.
Por su parte qué hicieron las derechas, pues actuar con bastante moderación ya que era evidente por cualquier observador imparcial que había riesgo de guerra civil inminente, finalmente Gil Robles exigió la entrada de la CEDA en el gobierno de Lerroux pero aún así sólo entraron 3 ministros de la CEDA en un claro ejemplo de moderación. Acto seguido la presencia de dichos diputados fue tomado como excusa por el PSOE y los catalanistas para poner en marcha la ya preparada insurrección armada que venía preparándose ya hacía meses.
Fue una insurrección bastante violenta por parte de las izquierdas con asesinatos de gente de derechas, empresarios, eclesiásticos
Como ejemplo señalar el asesinato de 6 seminaristas de Oviedo el 7 de octubre de 1934, incluyendo a un chaval de 16 años, los 8 hermanos de las Escuelas cristianas, así hasta un total de 115 muertos civiles inocentes que costó la revuelta. Fue una insurrección sangrienta ya que en total en combate murieron unas 250 personas entre miembros de la policía y el ejercito y hubo casi un millar de heridos. Entre los insurrectos se registraron 88 muertos de las cuales 4 fueron fusilados judicialmente, por lo que la mitología sobre la brutal represión de la República que llamó al general Franco para combatir la insurrección se cae por su propio peso. Es otra de las falsedades que se ha vendido durante años, ya que de las 15000 personas que ingresaron en prisión a los pocos días del golpe a los pocos meses fueron liberados.
Con lo expuesto hasta ahora el gobierno del centro – derecha podría haber aniquilado a las fuerzas izquierdistas tanto del PSOE, como de la CNT o Esquerra republicana que habían participado en el golpe de estado y situarlas fuera de la legalidad y disolverlas como partidos políticos.
Otra de las mitologías habituales es hacer creer que las fuerzas izquierdistas con su mayor sensibilidad hacia los problemas sociales hicieron más que el bienio centro – derecha por el campo y en la reforma agraria. Falso por completo, y nada mejor que lo señalado por el socialista Gabriel Mario de Coca: “los gobiernos derechistas asentaron a 20.000 campesinos, y bajo las Cortes reaccionarias de 1933 se efectuó el único avance social realizado por la República”.
Durante el bienio derechista – centrista se atajó considerablemente el paro con un plan nacional de pequeñas obras, se aprobó una ley de arrendamientos urbanos que protegía al inquilino, a nivel de hacienda se abordó una reforma técnica y profesional para reducir la estabilización presupuestaria y de forma sistemática las izquierdas boicotearon todas las medidas señaladas basándose únicamente a partir de su fracaso golpista en justificar su política en las supuestas barbaridades en la sofocación del golpe de octubre.
Comentas el caso de corrupción espeluznante del estraperlo que se destapó en septiembre de 1935, por si no lo sabías la palabra estraperlo viene de Strauss y Perl, dos personajes centroeuropeos que inventaron un juego de azar amañado para ganar dinero en dicho juego. Su entrada en España se debió al favor de personas próximas de Lerroux pero no directamente de él, y el total de los sobornos para que se dejara entrar dicho juego fue de 5000 pesetas y algunos relojes, pero lógicamente fue aprovechado tal supuesto escándalo por las izquierdas y medios afines para desencadenar una campaña de descrédito del viejo Lerroux. El tema llegó incluso a las Cortes y la administración de justicia no vio responsabilidad legal alguna en Lerroux.
Para finalizar ya hemos discutido la génesis del Frente Popular y los acontecimientos que llevaron desde la creación del Frente Popular con su firma del pacto el 15 de enero de 1936.
Se produjeron las elecciones que no perdió la derecha y con innumerables irregularidades sino fraudes directos, se alteró la realidad republicana haciendo dimitir al presidente de la República para situarse Azaña como jefe del gobierno y comenzó una política de tierra quemada respecto a las reformas del anterior gobierno y sobre todo los asesinatos a miembros de falange que fueron contestado, palizas, extorsiones, atentados a iglesias, etc, y que finalmente culminó con el asesinato del líder de la oposición Calvo Sotelo en su casa por fuerzas del orden, esto es, la propia República utilizó a sus fuerzas de seguridad para dar comienzo a la guerra civil.
Bueno, he metido un buen ladrillo, pero es un tema que me apasiona, no puedo poner una referencia de una página de internet, sino que mis opiniones son fruto de la afición que más me gusta que es leer libros de historia, es una opinión que lógicamente está abierto al debate. Repito que el que se defienda una versión diferente a lo que habitualmente nos venden no nos convierte directamente en fascistas o franquistas o totalitarios, yo nací en 1969 y no conozco de Franco más lo que he estudiado y leído, no soy franquista pero no me gusta la mentira y tergiversación histórica de unos hechos que ocurrieron en mi modesta opinión de forma parecida a lo expuesto. Yo no tengo la posesión de la verdad absoluta, pero hay otra verdad histórica y creo que es interesante conocerla y examinarla.
Saludos desde Benidorm.