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LoginFarsa
Desde hace un tiempo, tengo por costumbre, antes de reenviar un mail que puede parecerme interesante por diversos motivos, tratar de chequear la información. Y así fue cómo, días pasados, recibí un correo que daba cuenta acerca de una oración que habría pronunciado el padre Luis Farinello en ocasión de declararse inauguradas las sesiones ordinarias del Congreso, el 1 de marzo último.
Ante todo, cabe señalar que, de ser cierta la versión, la misma habría tenido amplia repercusión en los medios, lo que, evidentemente, no ocurriera, ya que ninguna de las crónicas periodísticas de ese día la recoge (como pude comprobar) ni tampoco se vio reflejada en los programas televisivos.
Además, me resultaba extraño el motivo, ya que, en nuestras prácticas legislativas, una invocación religiosa en ese ámbito y en tales circunstancias, no recuerdo que haya ocurrido alguna vez; interrogándome, finalmente, a qué título habría sido invitado el religioso a pronunciar esa oración.
Ahora bien: en el caso en que tal hecho hubiera tenido lugar, se trataría de un vulgar plagio realizado por alguien y con alguna finalidad que ignoro. En efecto: la oración existe, pero no fue pronunciada ni por Farinello ni en este país, sino en los Estados Unidos, por el reverendo Joe Wright.
Inicialmente, la invocación religiosa conocida como "Oración por nuestra nación" se atribuyó al pastor Billy Graham, pero, en realidad, fue Wright quien reprodujo parcialmente una similar rezada bajo el nombre de "Oración de arrepentimiento" y que fuera pronunciada por Bob Russell en un desayuno con el gobernador de Kentucky.
El reverendo Joe Wright era pastor de la Iglesia Cristiana Central de Wichita y fue invitado por el diputado Anthony Powell, republicano de ese Estado y miembro de su iglesia, para pronunciar una alocución religiosa el 23 de enero de 1996, con motivo de la apertura de las sesiones de la Cámara de Representantes de Kansas, la que, por su tenor, causara gran controversia.
Por tanto, la oración que se atribuye a Farinello no sólo no fue por él pronunciada sino que, de haberla realizado, se habría tratado de una burla a sus destinatarios, al atribuírsela como propia.
Pero la cosa no termina aquí, sino que hasta se han fraguado las repercusiones de la mentada oración. Así, en el caso de Wright, se sostiene que un legislador abandonó el recinto en desacuerdo con sus expresiones, en tanto otros tres se pronunciaron en sentido crítico, calificándolas como un "mensaje de intolerancia".
¿A que no adivina el lector cuántos de nuestros legisladores se habrían retirado del Congreso y cuántos lo habrían criticado? Acertó: igual que en Kansas: uno y tres, respectivamente.
Pero aquí no terminan las sugestivas coincidencias. Según la crónica estadunidense, el reverendo Wright recibió 5.000 llamadas, de las cuales sólo siete fueron desfavorables. ¿Sabe Ud. cuántas habría recibido Farinello en su parroquia? Pues exactamente las mismas, es decir, 5.000 (ni una más ni una menos), si bien su mensaje habría sido desaprobado por cuarenta y siete personas (se ve que se confundieron y agregaron un 4 delante del 7).
Finalmente, la crónica asegura que el pastor estadunidense recibió llamadas de India, Africa y Asia, pidiéndole que orara por ellos. ¿A que no imagina de qué países habrían provenido las llamadas que con igual finalidad habría recibido Farinello? ¿De algún país sudamericano? No: de India, Africa y Asia, con lo cual se demuestra que en esos lugares están muy al tanto de lo que ocurre en nuestro Congreso.
Por ello, sobrevuela la noticia local un cierto tufillo, en este año electoral; máxime, porque tampoco se entiende que, habiendo tantas fotos de Farinello, sólo aparezca acompañado por el gobernador Das Neves. Siendo así, estimado lector, esté atento, porque los fraudes y mentiras estarán a la orden del día. Para estar seguro, simplemente basta recurrir a Google y, colocando el nombre "Joe Wright Kansas", obtendrá toda la información que demuestra esta farsa, cuya finalidad, reitero, no puedo imaginar.
Carlos R. Baeza
Bahía Blanca