1. Que no puedan optar a ningún puesto en el sector público.
2. Incompatibilidad absoluta y perpetua de su miserable profesión, con cualquier otra.
3. Prohibición de que tengan otros clientes, que los terroristas de ETA.
4. Devolución de todos los ingresos percibidos por cualquier actividad que no sea la de abogados de ETA.
5. Prohibición de toda actividad como asesor jurídico en el sector privado.
ETC.
Esta es la ley que hace falta para los que son o han sido, abogados de los etarras.