López, Enrique López. Ha sido el ponente de una sentencia en la cual, después de que los terroristas robaran mediante la extorsión, prácticamente a punta de pistola, encima condene a la cárcel a los que sufrieron el robo por dejarse robar.
Todos los partidos presumen en mayor o menor grado, de socialismo, de defensa de los débiles frente a la injusticia del fuerte. Antes que Robin Hood, sucedió lo de David y Goliat, que simboliza el duelo desigual del débil contra el fuerte. Con la decisión de legalizar a ETA, lo que la gente no sabe es que se ha puesto en el disparadero de los terroristas a muchas personas, se ha permitido rearmar y envalentonar a la milicia terrorista, amedrentar, amenazar, reventar actos, agredir y en su caso, acceder a las direcciones de esas personas débiles, indefensas ante los terroristas que se han hecho fuertes, más fuertes aún. Y a estas personas desamparadas, nadie de los socialistas de todos los partidos los apoya, no existen, no están entre las prioridades de las instituciones el proteger su vida, sino más bien todo lo contrario. Y con estas personas es con las que yo me solidarizo.
Pues bien, cuando el Estado menos cumple con su labor de protección de estas personas, cuando el Estado más está engordando de medios a los terroristas, va este miserable y machaca de manera inmisericorde a estas dos víctimas de la extorsión etarra, que ahora encima lo son del ensañamiento del Estado. De la persecución inmisericorde y despiadada de la Fiscalía, la misma que deja de perseguir delitos, la misma que ha bajado los brazos ante el terrorismo. Y del ensañamiento injustificado de este Garzón del PP, que encima quiere entrar en la casa de Pascualone, que ha legalizado a la ETA. Renovar la basura en vez de tirarla, eso es lo que quiere hacer el PP con este abyecto y canalla de Enrique López. El mismo que condenó injustamente a la víctima de un robo etarra, por dejarse robar. ¡¡Felicidades señor López!! ¡¡Felicidades sr. Rajoy!! Habéis conseguido que los etarras brinden con cava por vuestra fechoría y se rompan las manos de aplaudiros. ¿Para eso quiere el PP a su Garzón? ¡¡Que les den!!
