1. Gobierna el PP, que es el más votado.
2. Al haber sido un triunfo relativo, en muchísimas ocasiones, sus propuestas tendrán el veto de la Asamblea.
3. Si la Asamblea abusa del veto, el nuevo Presidente podrá disolver la Asamblea y buscar un apoyo mayor en nuevas elecciones.
4. Si el Gobierno abusa de sus prerrogativas, la Asamblea puede someterle a un voto de censura. Y en todo caso, los electores podrán revocar el Gobierno en próximas convocatorias.
5. Y si el voto de censura resulta abiertamente infundado, la ciudadanía se encargará de castigar a la oposición, en nuevas elecciones.
Hay un razonable equilibrio, que si todos olvidaran un poco el radicalismo y fueran más a lo práctico, los extremeños se beneficiarán enormemente de ello.