Lo propongo precisamente por eso, porque es complicado. El sistema del sector público sobredimensionado vive del engaño, de que unos se crean un estado del bienestar que no es tal, sino ficción.
Y no es tal, no por lo que dicen los tertulianos, sino por la cadena de pagos. Las medicinas son chorizadas por el sector público, no por la colección de gilipolleces que dicen los tertulianos, sino porque las farmacias dejan de ingresar un precio con la condición de que el Estado lo reembolse, sin reembolsarlo. ¡¡Esta es la gran chorizada!! Esto y la inembargabilidad de los bienes públicos. Que los bienes públicos fueran embargables, esa era la gran reforma constitucional que esperaban todos los acreedores.
Es complicado, claro que es complicado. Como es complicado que España llegue a funcionar, como es complicado que los criminales paguen sus crímenes.
¿Y sabes qué es lo realmente complicado? Que esto no se vaya al garete y que esto no acabe en un baño de sangre.